El Ayuntamiento de Madrid impulsa nuevos recursos para luchar contra la soledad no deseada

En el marco del Proyecto Estratégico de Prevención de la Soledad no Deseada que están desarrollando las áreas de Vicealcaldía, Seguridad y Emergencias -a través de Madrid Salud- y de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, el Ayuntamiento de Madrid ha lanzado una campaña publicitaria con un doble objetivo: concienciar a los ciudadanos sobre esta realidad y acercar a los afectados los recursos que ofrece para combatirla.
Una de los nuevos servicios que ofrece el consistorio es la atención psicológica en domicilio que, además, introduce la figura del terapeuta ocupacional, clave para la adaptación del mayor a su entorno.
Este recurso municipal se enfoca en la prevención, detección y atención de la soledad no deseada y el aislamiento en personas mayores y se concibe como una prestación fundamental para que puedan permanecer en sus domicilios el mayor tiempo posible, dando respuesta a sus necesidades de cuidados y promoviendo su socialización y su envejecimiento activo.
Así, este servicio persigue poner fin a su sentimiento de soledad, trabajando para reducir sus consecuencias, como la ansiedad, el estrés o la depresión, y facilitar la aceptación de los recursos necesarios que permitan revertir estas situaciones. Al mismo tiempo, se busca capacitar y empoderar a las personas mayores, además de fortalecer su capacidad para relacionarse con los demás mediante técnicas de entrenamiento sociocognitivo y potenciación de sus habilidades sociales.
Atención individual y grupal
El abordaje de estas situaciones de soledad no deseada o aislamiento se lleva a cabo a través de dos tipos de intervención.
En el caso de la atención individual, el nuevo contrato contempla una actuación integral en la que se involucrarán diferentes perfiles profesionales. Actualmente, los casos son atendidos por integradores sociales, pero ahora se sumarán a ellos la figura del psicólogo y del terapeuta ocupacional para ofrecer un apoyo más completo a las personas mayores.
La fase de evaluación establecerá qué necesidades presenta el usuario y a partir de ahí comenzará un proceso de intervención personalizado que se desarrollará preferentemente en el domicilio y que incluirá al menos dos sesiones mensuales.
La terapia ocupacional será prescrita cuando la persona requiera apoyo para el aprendizaje de habilidades y funciones esenciales para la adaptación a su entorno o para restaurar su capacidad funcional. Una vez concluida la intervención, se agendarán llamadas de seguimiento que permitan detectar posibles recaídas en el sentimiento de soledad e identificar nuevas demandas, con el fin de satisfacerlas.
Respecto a la atención grupal, consistirá en talleres de diferentes temáticas que se llevarán a cabo en dependencias municipales y que estarán dirigidos por psicólogos. En este caso, una de las novedades del contrato es que todas las personas participantes realizarán el itinerario completo, beneficiándose de las propuestas sobre habilidades sociales, apoyo social o envejecimiento activo, así como de aspectos específicos de abordaje de la soledad no deseada. Estas actividades se desarrollarán en dos ediciones anuales (ahora solo hay una edición), con 21 talleres simultáneos en cada una de ellas.
El presupuesto del nuevo contrato asciende a 1,4 millones de euros
El nuevo contrato, promovido por el Área de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, se ejecutará en el periodo comprendido entre junio de 2025 y mayo de 2027, prorrogable por otros 24 meses adicionales. El presupuesto, de 1,4 millones de euros, supone un aumento del 48% con respecto al actual para poder implementar las mejoras anunciadas.
Durante el año 2024, gracias a este recurso se facilitó atención individual a 2.380 personas mayores, realizándose más de 5.700 visitas. Un 73 % de los usuarios valorados presentaban sentimiento de soledad no deseada de tipo relacional, emocional o ambas y un 6 % de los que afirmaron padecer esta soledad no querida solicitaron acompañamiento de una persona voluntaria. Además, en los talleres de intervención grupal participaron 1.173 personas.