Mato y los consejeros de Sanidad deciden esta tarde qué medicamentos dejará de financiar el SNS
En la propuesta emitida por el Ministerio están, por ejemplo, algunos fármacos para el tratamiento del deterioro cognitivo asociado a la edad

Ministerio de Sanidad y comunidades autónomas debaten hoy qué fármacos dejarán de ser financiados por el sistema público. La reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), esta tarde en la sede del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, lleva en el orden del día la aprobación de la exclusión de medicamentos de la financiación del SNS, en cumplimiento con el Real Decreto 16/2012 de reforma de la sanidad.
Así, la propuesta que la ministra, Ana Mato, elevará a los consejeros del ramo (y que ya ha sido remitido a los departamentos autonómicos para su estudio) incluye una relación de 456 fármacos susceptibles de dejar de ser financiados por el sistema público. Con la medida, Sanidad espera ahorrar al sistema alrededor de 440 millones de euros (en 2011, la facturación del SNS por estos 456 medicamentos alcanzó los 458 millones de euros, pero en el cálculo se descuenta la mayor aportación que han de realizar desde el 1 de julio los pacientes).
En la relación de fármacos que podrían excluirse hay medicamentos indicados para el tratamiento del deterioro cognitivo asociado a la edad (vasodilatadores periféricos, piracetam, pirisudanol, ésteres de deanol y extracto de ginko folium), para el extreñimiento (laxantes y antagonistas de opiáceos), antidiarreicos, para las varices y hemorroides (corticoides y bioflavonoides), para la inflamación reumática leve (diacereina) o para la psoriasis (extracto de calaguala), entre otros. Contrariamente a lo que se creía en un principio, sin embargo, principios activos como el paracetamol y el ibuprofeno seguirán siendo financiados por el sistema público.
En su propuesta, el Ministerio asegura que "se excluyen de la financiación pública medicamentos indicados en síntomas menores para mantener la capacidad de financiación de nuevas terapias, indicadas en enfermedades graves, invalidantes o de pronóstico fatal", aunque matiza que algunos de los fármacos a excluir "son muy útiles" desde el punto de vista terapéutico "en algunas patologías concretas graves", por lo que se mantendrán algunas excepciones al respecto.
Así, la propuesta que la ministra, Ana Mato, elevará a los consejeros del ramo (y que ya ha sido remitido a los departamentos autonómicos para su estudio) incluye una relación de 456 fármacos susceptibles de dejar de ser financiados por el sistema público. Con la medida, Sanidad espera ahorrar al sistema alrededor de 440 millones de euros (en 2011, la facturación del SNS por estos 456 medicamentos alcanzó los 458 millones de euros, pero en el cálculo se descuenta la mayor aportación que han de realizar desde el 1 de julio los pacientes).
En la relación de fármacos que podrían excluirse hay medicamentos indicados para el tratamiento del deterioro cognitivo asociado a la edad (vasodilatadores periféricos, piracetam, pirisudanol, ésteres de deanol y extracto de ginko folium), para el extreñimiento (laxantes y antagonistas de opiáceos), antidiarreicos, para las varices y hemorroides (corticoides y bioflavonoides), para la inflamación reumática leve (diacereina) o para la psoriasis (extracto de calaguala), entre otros. Contrariamente a lo que se creía en un principio, sin embargo, principios activos como el paracetamol y el ibuprofeno seguirán siendo financiados por el sistema público.
En su propuesta, el Ministerio asegura que "se excluyen de la financiación pública medicamentos indicados en síntomas menores para mantener la capacidad de financiación de nuevas terapias, indicadas en enfermedades graves, invalidantes o de pronóstico fatal", aunque matiza que algunos de los fármacos a excluir "son muy útiles" desde el punto de vista terapéutico "en algunas patologías concretas graves", por lo que se mantendrán algunas excepciones al respecto.