La colaboración entre los servicios de farmacia hospitalaria y neurología, clave para prescribir el mejor tratamiento para la EM

Estas son algunas de las conclusiones que se extrajeron del simposio organizado por Biogen Idec en el 59º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (Sefh), celebrado en Valladolid.
'En el caso concreto de la EM, nos estamos encontrando con tratamientos cada vez más numerosos, complejos y con un alto impacto económico. En este contexto, el farmacéutico juega un papel estratégico de asesoría a los neurólogos, aportándoles información sobre la utilización de medicamentos, de nuevas perspectivas de tratamiento y circuitos para disponer de ellas en tiempo real y útil. Por otro lado, la crisis económica ha propiciado que su papel en el diseño de estrategias de eficiencia, siempre establecidas desde el consenso con los neurólogos, cobre más protagonismo”, puso de manifiesto la doctora Molina.
Esta colaboración facilita que las respuestas que se dan al paciente, cada vez más informado y exigente, sean concordantes y complementarias, y ayuden a optimizar la adherencia farmacoterapéutica.
Según palabras de la doctora Molina, 'esta colaboración podría mejorarse siempre desde el consenso, la asesoría corresponsable, el avance en paralelo con las tecnologías; todo ello como un sistema excelente de apoyo para tener indicadores de efectividad y no solo de coste, centrándonos en el paciente y con el objetivo de mejorar los resultados clínicos en salud'.
'La aparición de nuevas terapias más eficaces y cómodas para el paciente está cambiando el panorama actual del tratamiento de la esclerosis múltiple', señaló el doctor José Carlos Álvarez-Cermeño, coordinador de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Servicio de Neurología del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.
'El futuro de la EM pasa por alcanzar una medicina personalizada, es decir, por prescribir a cada paciente el tratamiento más conveniente a su situación en un momento dado', añade el especialista. 'Para ello, se están investigando diferentes biomarcadores analíticos y de imagen para identificar a los pacientes con más probabilidades de responder, de forma óptima, a un medicamento u otro', explicó Álvarez-Cermeño.