Respuesta.- Como siempre decimos en los talleres, lo importante de la tecnología es que es un derecho, no una obligación, que es lo que están haciendo muchas empresas o Administraciones sin, además, dar los medios adecuados para que esto sea así. Es decir, lo principal es que los mayores y las personas de cualquier edad quieran aprovechar esta oportunidad de acercarse a las TIC. 

R.- Solemos tener un itinerario en función de las entidades o asociaciones con las que trabajamos en donde se recoge lo que ellas consideran que desean aprender los alumnos en el curso, pero no siempre es así, por eso les preguntamos a ellos qué quieren aprender. Lo esencial que mantenemos en todas las formaciones es que sean ellos mismos los que hagan las cosas. Les pedimos que lleven su propio teléfono, aunque también disponemos de tablets si es necesario, y les ayudamos a que sean ellos los que se familiaricen con el teléfono: que descarguen aplicaciones, lo configuren como ellos quieran, etcétera. Nosotros, en realidad, les damos confianza y estamos ahí para resolver sus dudas.

R.- Es verdad que suelen ser grupos heterogéneos así que cada uno se enfrenta a  una barrera distinta. Tenemos la barrera tecnológica de sus propios dispositivos, porque algunos de hecho no tienen ni smartphone o no con suficiente memoria, por ejemplo. Pero, por otro lado, existen barreras psicomotrices: letras muy pequeñas, teclas que no son capaces de manejar, códigos que han olvidado... Y, en tercer lugar, las barreras de aprendizaje. Como sucede con cualquier otra materia, hay personas que tienen más conocimientos o se desenvuelven mejor que otras.