Se acaba de autorizar la puesta en marcha de obras en tres residencias de mayores situadas en Madrid y Colmenar Viejo para la adaptación de 175 plazas de mayores en situación de dependencia, por un importe total estimado de 332.219 euros. Estas obras implican una reforma integral para la eliminación de barreras arquitectónicas, así como la rehabilitación del piso para hacer las residencias más funcionales y confortables para los usuarios.
Al tratarse de residencias de gran tamaño y con una antigüedad media superior a los 50 años, las obras, encargadas a la empresa pública Obras de Madrid, se realizan por módulos y fases. Así, en la Gran Residencia se va a remodelar un módulo con capacidad para 76 plazas; en Nuestra Señora del Carmen, otro de 36 plazas; y en la residencia de mayores Colmenar Viejo se van a adaptar 63 plazas.

Entre los centros adscritos a la Agencia Madrileña de Atención Social (Amas), se encuentran 25 residencias para mayores cuyo diseño arquitectónico responde a requerimientos que en nuestros días han quedado obsoletos. Por este motivo, la Amas dedica esfuerzos de inversión para adecuar estos recursos a las nuevas necesidades planteadas en el ámbito de la atención de mayores en situación de dependencia. Para ello, se está llevando a cabo una política de modernización de las residencias, a través del Plan de Inversiones de la Consejería de Políticas Sociales y Familia, centrada especialmente en la adaptación de las plazas existentes para mayores en plazas para mayores dependientes. Ya se han realizado las obras de adaptación de 286 plazas en la residencia Francisco de Vitoria, y de 25 en la residencia Nuestra Señora del Carmen, a las que hay que sumar las 175 plazas que se van a reformar en los próximos meses.
Asimismo, la Comunidad ha creado este año 20 nuevas plazas destinadas a mayores dependientes en la residencia de mayores Vista Alegre, en la que ya se atiende a 146 usuarios.