El cine es arte e industria, pero también puede ser una herramienta para educar a la sociedad y para promover una nueva concepción de la vejez. Así lo explicaron durante su ponencia “Imágenes y representaciones sociales de la vejez en el cine” Sacramento Pinazo, profesora de la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia, y Trinidad Núñez, profesora del departamento de Psicología Social de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla.
“¿Qué podemos hacer con el cine en los centros de mayores?”, planteó Pinazo durante su intervención. Ella misma respondió exponiendo su propia experiencia en el MuVIM (Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad), donde lleva ocho años celebrando actividades de cine intergeneracional. Una apuesta por la reflexión sobre la vejez a través del cine y en la que participan personas de todas las edades.
Durante el encuentro, las ponentes animaron a los presentes a la puesta en marcha de este tipo de iniciativas en centros de mayores, donde es posible hacer proyecciones de cine que interesen a los usuarios y que contribuyan a cambiar su mentalidad sobre su edad. “Darles un empujón para que vean que pueden hacer lo que quieran”, señaló Pinazo. En esta línea, las ponentes hicieron hincapié en la necesidad de que los propios profesionales del sector abandonen los prejuicios y estereotipos con respecto a este sector poblacional, pues sus gustos cinematográficos no tienen por que ser los que se presuponen a este colectivo.
Con el objetivo de animar a los profesionales que acudieron a su exposición, propusieron algunas películas que consideran interesantes para que los mayores las visionen. Son filmes que invitan a la reflexión y que ponen en el punto de mira diferentes formas de ver la vejez. Algunas de sus propuestas abordan temáticas como el Alzheimer o la viuedad, como es el caso de las películas “Iris” y “Cerezos en Flor”. Otras sin embargo animan a un cambio de mentalidad con respecto a las edades avanzadas. Es el caso de “Elsa y Fred”, de “¿Y si vivimos todos juntos?” y de “La vida empieza hoy”, esta última sobre sexualidad. El género documental también tuvo su aportación con “Corazones rebeldes”, producción británica donde amor, soledad, sexo, enfermedad y muerte se ponen al servicio del cine para romper tabúes.
Por su parte, Pilar Rodríguez, presidenta de la Fundación Pilares y moderadora del coloquio, quiso apuntar la película “Up”, una muestra de que los mayores pueden cambiar su modo de ver la vida. Además, se hizo especial mención de la novela gráfica de Paco Roca “Arrugas”, que fue adaptada al cine en 2009. Una historia sobre el Alzheimer y las ganas de vivir.