Un 70% de las personas afectadas por acúfenos declara ver disminuir su capacidad auditiva
Expertos en otorrinolaringología recomiendan visitar a un especialista ante la aparición de acúfenos y el riesgo que éstos suponen para la audición

Un 70% de las personas afectadas por acúfenos declara ver disminuir su capacidad auditiva (hipoacusia) en mayor o menor grado a causa de esta afección. Este dato se ha obtenido gracias a una encuesta realizada por los centros Ototech a pacientes con acúfenos o tinnitus, una afección del oído interno que hace que las personas oigan sonidos sin que exista estímulo externo que los provoque.
Además, el 74% de estas personas afirma que su afección interfiere en su capacidad para disfrutar de su tiempo libre y sus relaciones sociales, mientras que el 55% declara ver afectada su vida laboral y sus tareas en el trabajo a causa de sus problemas auditivos. Dependiendo de su intensidad, los acúfenos pueden afectar de una manera crucial la calidad de vida de quienes la padecen por lo que expertos en otorrinolaringología recomiendan visitar a un especialista ante los primeros signos de esta afección dado el riesgo que ésta supone para la audición.
Los acúfenos como causa de una pérdida auditiva
La hipoacusia o sordera, aparece a causa de una sobrestimulación del oído que deteriora las células sensoriales encargadas de llevar la información del sonido al cerebro. Aunque generalmente la pérdida de capacidad auditiva se ha considerado un problema propio de las personas de edad avanzada, los acúfenos pueden aparecer a cualquier edad, pudiendo poner en riesgo también la audición de jóvenes y niños.
La estrecha relación entre acúfenos e hipoacusia se debe a que el sonido del acúfeno impide muchas veces que los pacientes oigan los estímulos exteriores y además, les hace más sensibles a los sonidos. De hecho, ante un ruido fuerte sus oídos sufren una descompensación del volumen que puede llegar a provocar problemas de audición.
Por ello, el doctor Martínez-Monche, otorrinolaringólogo especializado en el tratamiento de acúfenos, recomienda evitar los sonidos superiores a 85 decibelios, así como proteger los oídos con tapones u orejeras en festivales, conciertos, discotecas… al ser uno de los grandes factores de riesgo de esta afección. Además, destaca la necesidad de tratar siempre infecciones o traumatismos de oídos bajo supervisión médica ante la importancia de prevenir la aparición de acúfenos. “Concienciar a la sociedad sobre la importancia de realizarse tests de audición ante cualquier signo o cambio en sus oídos permitiría detectar y tratar anomalías o deficiencias auditivas a cualquier edad”, declara el doctor.
La pérdida de audición, un problema global
Mientras que los acúfenos pueden desencadenar una pérdida de la capacidad auditiva que, detectada a tiempo, puede ser tratada; según la OMS, 360 millones de personas en todo el mundo padecen pérdida de audición discapacitante, la gran mayoría de veces causada por infecciones crónicas del oído, entre las que se encuentra la otitis media crónica.
Al contrario que los pacientes con acúfenos e hipoacusia leve o media, aquellos que sufren una pérdida de audición de forma severa ven alterada por completo su manera de percibir el mundo y necesitan ser aconsejados por especialistas para que puedan volver a relacionarse con el medio. “En ocasiones, pequeños restos auditivos que una persona sorda posee, pueden servirnos para que, por lo menos, identifique aquellos sonidos “ambiente” que pueden poner en riesgo su integridad física, como por ejemplo la alarma del frigorífico mal cerrado, una pipeta de gas abierta…”, declara el Doctor Martínez-Monche. “El poder identificar aquellas personas que potencialmente y de forma no quirúrgica pueden ser tratadas para captar y reconocer estos sonidos puede resultar una gran mejora en su calidad de vida.”, concluye el doctor.