Dejar de fumar, hacer más ejercicio, leer, visitar con frecuencia a nuestros seres queridos, etcétera. Estos son algunos de los propósitos que cada nuevo año nos planteamos para mejorar nuestra salud, física o emocional. Sigre, una entidad sin ánimo de lucro encargada de garantizar la correcta gestión medioambiental de los envases y restos de medicamentos que se generan en los hogares, añade uno más que suele pasar más desapercibido: la revisión periódica –cada seis o 12 meses– de esa “caja”, el botiquín que tenemos en casa, y en la que probablemente haya medicamentos caducados y otros que ni siquiera recordamos para qué servían.

SÉIS RECOMENDACIONES

Mantener el botiquín doméstico actualizado es esencial para nuestra salud y las de quienes nos rodean. Con este objetivo, Sigre nos ofrece seis consejos para mantenerlo siempre al día.

En primer lugar, guardar siempre los medicamentos perfectamente identificados, con su prospecto y envase original. De esta forma, siempre estará disponible la información necesaria del medicamento, como es el caso de su fecha de caducidad y las condiciones de conservación, lo que facilitará la labor de revisión.

Segundo, no olvidar que el botiquín debe ubicarse en un lugar fresco y seco, por lo que se debe evitar guardarlo en el baño o en la cocina, ya que son espacios en los se genera humedad y cambios bruscos de temperatura.

Como tercera recomendación, Sigre señala la necesidad de retirar los medicamentos caducados o en mal estado de conservación, y también aquellos que no se vayan a necesitar en el futuro. Una vez retirados, se deben llevar, junto con sus envases, al Punto Sigre de la farmacia para que reciban un correcto tratamiento medioambiental.

Cuarto consejo, cuando se finaliza un medicamento y quedan en el botiquín los envases vacíos (frascos, blísteres, aerosoles, ampollas, etcétera) y las cajas de cartón, hay que llevarlos también al Punto Sigre. Esto es muy importante porque los envases pueden contener aún restos del fármaco.

Quinto. No se deben almacenar en el botiquín dosis sobrantes. Si al finalizar el tratamiento han sobrado algunas dosis, también hay que llevarlas al Punto Sigre de la farmacia. ¡Preste especial atención a los antibióticos para evitar las resistencias antimicrobianas!

Finalmente, y como sexta recomendación, desde Sigre recuerdan que en caso de duda, consultar al farmacéutico, quien asesorará adecuadamente sobre cómo se debe hacer una buena gestión del botiquín doméstico.

Con estos sencillos pasos, se reduce el peligro que puede suponer para la salud el consumo de medicamentos sobrantes o caducados. Además, depositar estos residuos en el Punto Sigre evita la contaminación de ríos y suelos, y permite reciclar los materiales de los envases para darles un nuevo uso.