Luis Gutiérrez Serantes / Divulgador, médico de familia y colaborador de Marnys
“No existen trucos infalibles, pero sí hay ciertos hábitos que podemos implementar en nuestro día a día que ayudan a evitar los contagios”
Pregunta.- Empiezan a notarse los síntomas de esas infecciones respiratorias tan propias de esta época del año. Pero, claro, unas veces son catarros, otras resfriados o gripe. ¿Cuál es la diferencia de cada una y qué importancia hay que darle en cada caso?
Respuesta.- Efectivamente, durante el otoño e invierno es común que aparezcan catarros y gripe estacional con síntomas muy similares. Tanto la gripe como el resfriado tienen origen vírico y se contagian con gran facilidad, ya que al toser y estornudar expulsamos partículas que pueden ser inhaladas por los demás presentes en ese ambiente.
A la hora de diferenciarlas, la principal característica de la gripe es la aparición rápida y brusca con fiebre alta que puede superar los 38ºC, también suele tener tos severa y con mucosidad, además de dolor de cabeza y muscular. Al contrario que en la gripe, los primeros signos del catarro son dolor de cabeza y moqueo, junto con tos seca y estornudos, que van apareciendo de forma gradual.
P.- Estos procesos son especialmente importantes si hablamos de las personas mayores por tener asociadas otras enfermedades o como consecuencia de un sistema inmune más debilitado… ¿Cómo habría que actuar en cada caso entre esta población?
R.- Además de personas mayores, existen otros grupos de población que tienen más riesgo de sufrir complicaciones o sintomatología más grave como niños pequeños y lactantes, embarazadas y personas que padecen patologías crónicas, especialmente respiratorias. En estos casos, recomiendo vacunarse cada año contra la gripe y extremar las medidas de higiene como lavarse las manos con frecuencia, evitando espacios cerrados y repletos de gente, evitar compartir utensilios como vasos y cubiertos.
P.- El número de muertes por gripe en España ascendió a 1.535 en 2023, un dato que obliga a que no se infravalore este tipo de afecciones. ¿Es la vacunación una barrera recomendada siempre?
R.- Recomiendo la vacunación en los grupos mencionados anteriormente, especialmente en personas mayores de 65 años, aunque por supuesto existen casos como personas inmunodeprimidas o con patologías crónicas en los que también es importante valorarlo. Por ello, lo ideal es consultarlo con tu médico para que valore tu caso en concreto.
P.—En todo caso, ¿qué medidas preventivas recomendaría adoptar para evitar este contagio entre este colectivo?
R.- No existen trucos infalibles, pero sí hay ciertos hábitos que podemos implementar todos en nuestro día a día que pueden ayudar a evitar los contagios como cubrirse la boca y la nariz al estornudar y lavarse las manos con frecuencia, así como utilizar mascarillas FFP2 si ya tenemos algún síntoma o convivimos con personas que los tienen.
Además, hay que prestar especial atención a la alimentación, y seguir una dieta rica en vitamina C, ayudándonos de complementos alimenticios si fuera necesario, preferiblemente con tecnología liposomada como VIT-C 1000 para una mejor absorción.
También es importante no automedicarse de forma preventiva y tampoco ante cualquier síntoma, y acudir siempre al médico de cabecera para un diagnóstico y tratamiento adecuado.