Pablo Bustinduy, ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha participado en un acto celebrado en la sede del Imserso, en Madrid, que ha servido para presentar la estrategia estatal que llevó esta semana para su aprobación al Consejo de Ministros y que lleva por título 'Hacia un nuevo modelo de cuidados en la comunidad: un proceso de desinstitucionalización'. Esta estrategia engloba el período 2024-2030 y contará con una dotación económica inicial que supera los 1.300 millones de euros (1.323 millones de euros), usando para ello el Fondo Social Europeo Plus y fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Esta
estrategia, ha señalado el ministro, supondrá una
“revolución en el modelo de cuidados” para las personas en situación de dependencia, especialmente personas mayores, pero también personas con discapacidad, personas sin hogar y menores migrantes. Con este objetivo, Bustinduy ha anunciado que se van a destinar más recursos a servicios como la atención a domicilio, la teleasistencia o los centros de día, “para que las personas que necesitan cuidados no se vean obligadas a vivir en macroresidencias y puedan permanecer en sus casas, en sus barrios o en sus pueblos todo el tiempo que les sea posible”, ha explicado.
Sobre esta cuestión, Bustinduy ha hecho referencia a los proyectos pilotos iniciados y financiados por su ministerio para desarrollar este nuevo modelo de cuidados y que, según ha indicado, están demostrando los resultados positivos que se producen en las personas con dependencia cuando reciben una atención más cercana y en entorno comunitarios. “Estos proyectos y esta estrategia nos ofrecen un horizonte esperanzador al que nos debemos dirigir. Tenemos que hacer una transición en los próximos años para priorizar aquellos cuidados más enfocados en la persona, en lugar del modelo asistencialista actual”, ha dicho.
Para ello, el ministro ha recalcado que es necesario incorporar más profesionales al sector de los cuidados a personas dependientes, actualmente formado por mujeres en su mayoría (un 80%), como ha apuntado, y mejorar sus condiciones laborales y salariales, además de revalorizar esta profesión. “Es el principal reto de país que tenemos por delante, por las transformaciones de la estructura demográfica y de las estructuras familiares que hay en España, con una sociedad cada vez más longeva en la que se va a multiplicar el número de personas en situación de dependencia”, ha manifestado el ministro, al tiempo que ponía el foco en la financiación, afirmando que el Gobierno de coalición llevó a cabo un incremento “histórico” de las partidas destinadas a dependencia, “y, sin embargo, sigue siendo insuficiente porque aún seguimos sufriendo los recortes que hubo en la década pasada”, ha añadido.
Sobre esta cuestión, Bustinduy ha propuesto blindar la financiación de los servicios sociales y de la dependencia para que no vuelva a haber recortes en estas áreas, “y para el sistema de bienestar social sea una apuesta prioritaria del país, y no dependa de qué partido está en el Gobierno”, ha apuntado. Y ha recordado que la casi totalidad de los fondos destinados a dependencia, y a esta estrategia en particular, se transfiere a las comunidades autónomas. Por esta razón, ha hecho un llamamiento a los gobiernos autonómicos para que usen estos fondos en implementar este cambio de modelo de cuidados, y para que sigan reforzando la financiación pública del sistema de dependencia.
Además del ministro, este evento ha contado con la participación de los secretarios de Estado de cinco ministerios; Rosa Martínez (Derechos Sociales), Javier Padilla (Sanidad), David Lucas (Vivienda y Agenda Urbana), Rubén Pérez (Juventud e Infancia) y Aina Calvo (Igualdad). Así mismo, en el evento han intervenido diferentes expertos e investigadores en el ámbito de los cuidados, y también personas que reciben o han recibido cuidados en este ámbito.