Montevideo reúne a más de 200 profesionales en un seminario iberoamericano sobre gerontología

Vázquez destacó la necesidad de mejorar las respuestas sociales y sanitarias, exigiendo nuevos estándares profesionales en la atención. Unos requerimientos cada vez más necesarios debido al incremento de la población mayor, el aumento de la expectativa de vida y los cambios en la estructura familiar de apoyo. “El seminario trataba de analizar cómo han ido evolucionando los diferentes modelos en los centros. Hemos pasado de uno benéfico a uno más asistencial y de cuidados. El actual es una especie de fusión entre un modelo hostelero y uno sanitario”, explicó Miguel Ángel Vázquez.
Una atención centrada en la persona
El profesor puso especial énfasis en la atención centrada en la persona, un nuevo enfoque en la atención gerontológica que, según Vázquez, supone un desafío a emprender. “El plan que se propone es uno de apoyo, en el que lo importante no son solamente los cuidados sino la persona como tal”, asegura el profesor para luego insistir en que hay que “modificar necesariamente las estructuras de los centros para cuidar a las personas. Cambiar también el paradigma del cuidado y pensar en un modelo que haga feliz a los usuarios”.
Según Vázquez, todo esto implica que hay que poner en el centro del interés la atención a la persona, sus derechos y sus preferencias. Con actividades en las que cada mayor encuentre sentido a su vida, ya que “es más importante cuidar el aspecto psicoemocional que el físico”, afirma el especialista.
Para llevar a cabo este cambio, Vázquez indicó que primero se requiere una toma de conciencia y compromiso de todos los actores involucrados. “Hay que ponerse en la piel de los mayores y empatizar con su situación. Tenemos que preguntarnos, ¿qué espera de nosotros una persona mayor que ingresa en un centro?”, una cuestión que el profesor resolvió insistiendo en reforzar “la autonomía moral y autoestima de los residentes. Nosotros debemos estar para apoyar lo que esa persona quiera, no para decidir absolutamente nada”.
Líneas estratégicas de futuro
El seminario repasó la actualidad de los programas, centros y servicios de atención y evaluó el papel de las familias y su integración en el trabajo de equipo. Durante aproximadamente dos horas se intentaron definir las líneas estratégicas de futuro para la competitividad, rentabilidad y calidad de vida. “Esta reflexión de los modelos se lleva haciendo en España desde los últimos seis o siete años. Ahora lo que piensa una persona cuando entra en un geriátrico es: aquí no sé si me gustaría estar. Por eso tiene que cambiar”, sentencia el profesor, que recuerda que “hemos tardado 20 años en consolidar el modelo actual, el cual fue necesario pero ahora tardaremos otros 10 o 15 años en acercarnos a este plan mucho más nórdico, con unidades residenciales más pequeñas donde se ponga valor a la persona en sí misma al margen de sus dependencias, capacidades o minusvalías”, concluyó Vázquez.