El Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo (Gero), publicó recientemente los resultados de un estudio que valida la utilidad clínica de un test de memoria visuo-verbal para apoyar el diagnóstico del Alzheimer en personas analfabetas o con bajo nivel de escolaridad. La aplicación de esta herramienta permitirá mejorar los resultados de las evaluaciones neuropsicológicas, el principal examen para el diagnóstico de la enfermedad en este tipo de pacientes.
El trabajo, liderado por la subdirectora de Gero, la doctora Andrea Slachevsky, fue publicado en el mes de diciembre por la revista científica Journal of Alzheimer’s Disease. La facultativa explicó que las conclusiones de la investigación suponen la validación científica de dos versiones de un test, una de las cuales fue desarollado en Chile (ambos reflejados en un primer estudio publicado el año 2016). Nuestro estudio mostró que bajó rendimientos en ambas versiones del test se asocian con atrofia (daño) de las estructuras hipocompales y parahipocompales, que son una de las primeras en dañarse en la demencia tipo Alzheimer.
“Las motivaciones de nuestro trabajo fueron dobles: primero, diseñar una versión de este test que pudiera ser aplicada en población con bajo nivel escolar, de tal manera que su aplicación no requiriera leer; y la segunda, quisimos ver si en las dos versiones del test, tanto verbal como de imágenes, los rendimientos efectivamente reflejaban una alteración coincidente en las regiones hipocampales. Esta línea de investigación ha permitido obtener buenas herramientas para uso clínico inmediato, mejorando su utilidad y con validez científica, para diagnósticos más apropiados”, señala. Actualmente las guías internacionales establecen que en caso de duda diagnostica el principal examen para aclarar las dudas diagnosticas son las evaluaciones neuropsicológicos. En estas evaluaciones se realiza una evaluación objetiva de las capacidades amnésicas de las personas.
TEST EN PLAN NACIONAL DE DEMENCIAS
Las herramientas serán incorporadas en el Plan Nacional de Demencias para su aplicación en evaluaciones neuropsicológicas de pacientes cuyo diagnóstico no haya logrado ser establecido con certeza por parte de los equipos médicos. Específicamente, ambos test forman parte de las evaluaciones neuropsicológicas que se administran en pacientes atendidos en las Unidades de Memoria que se implementarán en la atención secundaria de salud. “Es importante que con herramientas desarrolladas y validadas en Chile podamos tener mejores diagnósticos”, agregó Slachevsky.
El Alzheimer es una de las principales patologías de la memoria que afectan a los chilenos, y su prevalencia se ha duplicado en los últimos 20 años, de acuerdo a cifras oficiales. En el año 2013, de cada cien mil fallecimientos, 20,4 se registraron como consecuencia de esta enfermedad. Las cifras coinciden con el progresivo envejecimiento de la población en el país, que al 2050 tendrá un 25% de personas mayores de 60 años.
RESULTADOS MUESTRAN SIMETRÍA EN AMBOS TEST
El objetivo de este estudio fue establecer el correlato neuronal de las versiones visual y verbal del test, creado el año 2016 por un equipo liderado por Andrea Slachevsky, y que también fue publicado en revistas científicas.
La investigación que sucedió a ese primer trabajo tuvo como objetivo comparar los resultados de las dos modalidades de aplicación. Las conclusiones mostraron que parámetros como el recuerdo libre y la recuperación total en ambas versiones no difirieron significativamente, lo cual permite generar un mecanismo para apoyar el diagnóstico en pacientes con un bajo nivel de escolaridad o analfabetos.
“En el artículo demostramos cómo los bajos rendimientos en ambas versiones se asocian con la pérdida de neuronas en regiones hipocampales, que son las primeras comprometidas en la patología. El test pone de manifiesto que el trastorno de la memoria detectado se puede atribuir al daño generado por el Alzheimer. Esto tiene mucha importancia clínica porque el diagnóstico, de acuerdo al actual estado de conocimiento de la enfermedad, debe basarse en una evaluación neuropsicológica, en caso de que los antecedentes clínicos del paciente generen dudas”, explicó la facultativa.
El trabajo liderado por el Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo fue realizado en forma colaborativa en conjunto con la doctora Carolina Delgado del Hospital J.J. Aguirre; Paulo Barraza, del Centro Investigación Avanzado en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile; Eduardo Bravo y Mauricio Farías, del Servicio de Neuroradiología Instituto Nacional de Neurocirugía; y el colaborador internacional, el doctor Michael Hornberger, líder del Departamento de Medicina de la Escuela de Medicina de la Universidad de Norwich, Inglaterra.
Slachevsky subrayó que “en términos de conocimiento científico, somos el primer grupo que comparó dos modalidades de aplicación que, si bien registraron algunas diferencias menores en sus resultados, tienen la misma especificidad para apoyar el diagnóstico final de manera más certera”.
UN TEST “MADE IN CHILE”
El test –que tiene un tiempo de aplicación de 20 minutos y debe ser administrado por personal de salud capacitado– consiste en mostrar al paciente palabras u imágenes de objetos (según la modalidad escogida) asociados a una determinada categoría semántica. Por ejemplo, si en la lámina aparece un elefante se debe relacionar con la categoría “animal”. Si el evaluado no responde, el administrador puede dar una clave semántica para ver si éste puede buscar la palabra.
Según explican sus desarrolladores, este mecanismo de ayuda es relevante para mejorar la certeza del diagnóstico, al reducir los fallos por incomprensión de la información, desatención o distracción. En definitiva, este procedimiento basado en conceptos, categorías y claves semánticas asegura que el paciente obtenga resultados vinculados exclusivamente a sus problemas de memoria y no a circunstancias atencionales por nerviosismo o falta de costumbre con procesos diagnósticos.
Un factor de adecuación muy relevante en regiones como Latinoamérica, donde se estima que cerca del 6% de los mayores podría sufrir esta enfermedad. De hecho, la herramienta está siendo actualmente testeada en la ciudad peruana de Callao en población analfabeta por el doctor Nilton Custodio, neurólogo de Lima, a la espera de evaluar sus resultados durante este año. “Hay una carencia de herramientas diagnósticas y pre diagnósticas adecuadas a la realidad local, y si no tenemos evaluaciones adecuadamente validadas en Chile no podremos hacer buenos diagnósticos. Creemos que este aporte puede ser muy importante para pacientes tanto en el país como en el resto del continente”, concluyó Slachevsky.