Euskadi aspira a atraer más de 5.700 millones de euros de los Fondos Next Generation de la Unión Europea. Para ello, el Consejo de Gobierno acaba de aprobar el programa Euskadi Next 21-26, una iniciativa de inversiones que el Gobierno Vasco, en coordinación con las tres diputaciones forales y los ayuntamientos de las tres capitales vascas, traslada al Gobierno central para que se incluya en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) que enviará a Europa para optar a los Fondos Next Generation EU, concretamente, a los procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). “Representa un acicate y una oportunidad para acelerar las tres grandes transformaciones de futuro: tecnológica y digital; energética y medioambiental; y demográfica y social. Tres transiciones globales, tres grandes oportunidades para Euskadi”, subrayó el Lehendakari, Iñigo Urkullu, tras el Consejo de Gobierno.
Así, esta primera versión del programa recoge, en ocho ámbitos estratégicos, 188 inversiones, entre las que destacan los 16 Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica de Euskadi (Perte), y se aspira a recibir fondos del MRR por valor de 5.702 millones de euros. Esta cuantía, unida a la aportada por los presupuestos propios de las Administraciones vascas y por inversión privada, activaría un total de 13.135 millones en los próximos cinco años.
“El gran desafío de este programa, que es un documento vivo ya que hasta el 30 de abril existe plazo para seguir completándolo, es seguir construyendo una Euskadi verde, digital e inclusiva”, aseguran desde el Gobierno Vasco. Se trata de apoyar proyectos que supongan un cambio estructural y tengan un impacto duradero sobre la resiliencia económica y social, la sostenibilidad, la competitividad a largo plazo y el empleo. Las medidas de Euskadi Next orientadas a la transición energético-ecológica alcanzan el 63% del MRR -superan el 37% marcado por Europa-, mientras que las orientadas a la transición digital alcanzan 21% -un punto superior al umbral que marca la UE-. “Euskadi cuenta hoy con un plan propio y estratégico que entrega al Gobierno de España con vocación de colaboración, para responder con éxito al desafío que nos espera los próximos años y que desde Euskadi afrontamos con ilusión, convicción y firmeza”, afirmó el Consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu.
El consejero Azpiazu calificó el programa como “ambicioso y realizado desde el rigor de la gestión pública, con cuantificación y calendarización de cada inversión prevista”, y apuntó también que se trata de un planteamiento pragmático enfocado a absorber la mayor cantidad de recursos europeos posible.
OCHO ÁMBITOS DE ACTUACIÓN
Los ocho componentes del Euskadi Next son coherentes tanto con los siete ámbitos emblemáticos señalados por la Comisión Europea, como con las diez políticas palanca y 30 componentes identificados en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España. Así, estos ocho ámbitos serían ‘Salud y cuidado de las personas’, ‘Aprendizaje a lo largo de la vida’, ‘Generación de energías renovables’, ‘Movilidad sostenible’, ‘Digitalización e Innovación de las Administraciones, empresas y cadenas de valor’, ‘Hábitat urbano’, ‘Hábitat natural y prevención desastres naturales’ y ‘Economía Circular’.
El Lehendakari recordó que Euskadi, después de cada crisis, ha vuelto a rehacerse: “Nos proponemos aprovechar esta situación para renacer más fuertes. En realidad, cada crisis ha espoleado nuestro espíritu de supervivencia, capacidad de adaptación y carácter emprendedor”. En este sentido, Urkullo insistió en que la hoja de ruta económico y social de la comunidad que preside se basa en el Programa Berpiztu de reactivación, los Presupuestos 2021 y Plan Euskadi Next. “Compartimos el mismo objetivo de País: transformar nuestra economía y conseguir aumentar la cantidad y calidad del empleo en Euskadi”, señaló.
De estas temáticas señaladas, algunas afectan directamente al colectivo senior. El programa recoge 27 inversiones en el apartado de salud y cuidados. Los servicios sociales, sanitarios y sociosanitarios requieren un impulso para mejorar su capacidad de respuesta, por separado y de manera conjunta, a los retos existentes y que se han acentuado debido a la crisis sanitaria, económica y social de la Covid-19. “Se trata de retos asociados a la transición sanitaria y social, con especial atención, por un lado, a las personas mayores como colectivo especialmente afectado y, por otro, al desarrollo tecnológico-digital, como requisito indispensable para dar una adecuada respuesta a la situación generada”, remarcan desde el Gobierno Vasco. Además, se pretende garantizar la calidad asistencial y reforzar la atención en el domicilio y el entorno próximo a los senior, impulsando, por ejemplo, la generación de ecosistemas locales de atención, cuidados y apoyos, así como fomentar un nuevo modelo de Atención Centrada en la Persona (ACP), facilitando que las personas mayores vivan en su propia casa, y definiendo nuevos perfiles profesionales y actividades para ofrecer un servicio más eficaz y eficiente.
En este ámbito estratégico hay tres Perte: ‘Gipuzkoa Advanced New Therapies Territory’ (GANTT), el proyecto Osasunberri (una solución integral de diagnóstico y terapias para la gestión de la Covid-19 y futuras pandemias) y el proyecto ‘Economía de los cuidados’.
En el apartado de aprendizaje a lo largo de la vida se proponen ocho inversiones. “Resulta sobradamente conocido el papel central que la educación juega como motor esencial para lograr una sociedad más próspera, justa, equilibrada y cohesionada, en la que todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades de progreso material y espiritual”, señalan desde la Administración. En el contexto actual marcado por el progreso técnico y digital, cada vez es más necesario “prestar una atención creciente a la educación como un proceso que no puede limitarse únicamente a los primeros años de la vida de las personas, sino que requiere una atención constante a lo largo de todo su ciclo vital”.
En este sentido, el aprendizaje permanente debe entenderse como “una herramienta eficaz que permite el constante desarrollo de las habilidades y conocimientos que una persona puede necesitar a lo largo de su vida, tanto a nivel profesional como personal”, detallan en el Gobierno.
La digitalización registra hasta 68 inversiones, un ámbito que en el que la propia comunidad está apostando fuerte. En este sentido, apuntan desde la Administración, “la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación son indicadores clave del desarrollo económico de un país y condicionantes de su productividad y competitividad, así como un factor determinante para lograr un crecimiento sostenible”. Euskadi viene realizando en las últimas décadas un importante esfuerzo conjunto público-privado sobre las bases de la especialización inteligente, con el objetivo prioritario de hacer de la región un polo de innovación europeo y facilitar la transición tecnológica y digital de su tejido productivo. Así, se avanzan hacia temáticas como la inteligencia artificial, el big data, el internet de las cosas, las tecnologías 5G, los sistemas ciberfísicos y la ciberseguridad, entre otras. Muchas de estas tecnologías ligadas directa o indirectamente a servicios que atiende a las personas mayores, como podría ser la telemedicina o la teleasistencia.
Tres proyectos forman parte de la categoría en este componente digital: el ‘Parque terrestre de producción acuícola en Basordas’, el proyecto ‘Basque Research & Technology Alliance’ (BRTA) y el proyecto ‘Gipuzkoa Quantum’.
Desde el punto de vista del hábitat urbano (18 inversiones), los desafíos que enfrenta Euskadi, enmarcados en las tres grandes transformaciones energético-ecológico, tecnológico-digital y demográfico-social, requieren fomentar unas ciudades y pueblos resilientes, sostenibles, inteligentes, inclusivos y seguros, “en los que nadie ni ningún lugar se quede atrás”, indican.
Euskadi Next pone en valor la necesidad de intervenir particularmente en barrios vulnerables, aunque con miras a todo el territorio, en ámbitos como la mejora de la accesibilidad y la habitabilidad, el fomento de la sostenibilidad y el balance energético nulo, el desarrollo de equipamientos de proximidad, la creación de ecosistemas digitales o el impulso a la seguridad y ciberseguridad ciudadana.
Además, se pretende también promover la rehabilitación del parque de viviendas ya existente, con un interés especial por la vivienda vacía. Aparecen como áreas de acción prioritarias la regeneración urbana (con especial atención al riesgo de pobreza energética y la mejora de las condiciones de habitabilidad) y la innovación en vivienda, incluyendo la edificación inteligente y la edificación cero emisiones, a fin de potenciar la accesibilidad, la eficiencia energética y la construcción sostenible como líneas de trabajo clave ante el nuevo contexto demográfico-social y energético-ecológico. Este componente recoge el proyecto estratégico de ‘Regeneración Urbana Integral en ámbitos vulnerables’ de la CAPV.
ACCESO A LAS AYUDAS
Los ayuntamientos vascos podrán acceder a estos recursos por distintas vías, la primera será mediante convocatorias de ayudas directamente gestionadas por el Gobierno Vasco y organismos asociados, y las diputaciones forales que tendrán a los ayuntamientos como beneficiarios. Estas ayudas, se canalizarán a través de convocatorias ya conocidas y empleadas por los municipios vascos y que contarán con recursos adicionales procedentes del MRR.
En segundo lugar, Euskadi Next contempla líneas de actuación con un marcado carácter municipal. Su presencia también se garantiza en el nivel de los Perte, con participación directa de 22 municipios vascos de los tres territorios históricos en el proyecto de ‘Regeneración Urbana Integral en ámbitos vulnerables’ de la CAPV.
Por último, la tercera vía será directa con el Estado, ya que de acuerdo con la información disponible de los PGE 2021, las entidades locales contarán con transferencias directas.
Además, y por lo que respecta a la participación de los ayuntamientos en el modelo de gobernanza de Euskadi Next, se contempla la creación de un órgano de coordinación permanente entre el Departamento de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, las diputaciones y la Asociación de Municipios Vascos (Eudel) para garantizar el flujo de información, “que permita conocer en todo momento las diferentes vías de acceso a los recursos provenientes de Europa”. explican desde el Gobierno Vasco.