Aerte valora la figura del cuidador informal en la atención a dependientes

En este sentido, Giménez recordó que, como prestaciones de atención a la dependencia, se contemplan tanto prestaciones económicas como servicios, si bien, estos últimos tendrán carácter prioritario y se deben prestar a través de la oferta de la Red de Servicios Sociales por las respectivas comunidades mediante centros y servicios públicos o privados concertados debidamente acreditados.
Datos concretos
El presidente de la patronal añadió que el cuidador informal o familiar se considera una “figura excepcional” válida únicamente cuando no existan los citados servicios profesionales, por lo que no consideran “lógico” que casi el 60% de los dependientes acabe con un cuidador, a pesar de que su grado de dependencia requiera atención profesional y, en muchos casos, cuidados sociosanitarios las 24 horas. En consecuencia de esta situación, en el último año, y amparándose en la crisis económica, la Comunidad Valenciana ha alcanzado los 27.026 cuidadores familiares, duplicando el número de los existentes en las mismas fechas de 2010, en el que operaban alrededor de 13.827 cuidadores informales, de los que más de 60% atendían casos que requieren cuidados profesionales y conocimientos avanzados en materia sociosanitaria.