Los centros madrileños de Ballesol han organizado diferentes Mercadillos Solidarios

Con el deseo de que “los niños con cáncer nunca pierdan la sonrisa”, los usuarios de estas residencias han creado y diseñado en los talleres de Laborterapia diversos objetos y productos que se han puesto a la venta, con el propósito solidario de mejorar las condiciones de vida y la estancia en el hospital de enfermos y familiares de cáncer.
Este proyecto -activo hasta finales del mes de enero-, es un ejemplo de Solidaridad Intergeneracional coordinado por el Departamento de Animación Sociocultural de Grupo Ballesol, que destacó “la participación activa y coordinada de los residentes en las distintas actividades de manualidades” tanto en la elaboración de muñecos de papel, cartón y madera como en el diseño de carteras, abanicos y pañuelos.
En la actualidad la Fundación Aladina apoya cada año a más de 1.000 pacientes y a sus familias, consiguiendo que recuperen la sonrisa y la esperanza en esta dura lucha.
El próximo 4 de febrero se hará entrega de un talón con los fondos recaudados a la Fundación Aladina.