JOSÉ FÉLIX BARRIO / PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN AJEA (ASOCIACIÓN DE JUBILADOS DE LA ENSEÑANZA DE ALCORCÓN)
‘Desde las aulas hay que formar a los alumnos para que comprendan que el envejecimiento es una etapa más de la vida’
AJEA nació el 12 de octubre de 2002, cuando 12 maestros y profesores de Alcorcón decidieron formar una Asociación de Jubilados de la Enseñanza con el objetivo de enriquecer la vida de los docentes que ya no están en activo, estimular su vida social y cultural y colaborar desinteresadamente con la sociedad

Pregunta.- ¿Cómo nació la Asociación AJEA y cuáles son su principales objetivos?
Respuesta.- AJEA nació el 12 de octubre de 2002, cuando 12 maestros y profesores de Alcorcón decidieron formar una Asociación de Jubilados de la Enseñanza y crear sus Estatutos, que fueron aprobados el 3 de marzo de 2003, al amparo del artículo 22 de la Constitución y de conformidad con la Ley orgánica 1/2002 de 22 de marzo que regula el derecho de asociación.
Nuestra junta directiva está compuesta de un presidente, vicepresidente, secretario, tesorero y vocales culturales que coordinan y programan las actividades, realizando un proyecto anual que se presenta en el Ayuntamiento de Alcorcón.
Los principales objetivos con los que nació Ajea son enriquecer la vida de los jubilados docentes, estimular su vida social y cultural, colaborar desinteresadamente con la sociedad, participar en actividades turísticas, culturales, etcétera, y ofrecer una bolsa de voluntariado entre nuestros miembros.
P.- Como presidente, ¿qué destacaría de la labor que realiza la asociación?
R.- Como educadores jubilados que somos en los diferentes niveles de enseñanza, profesores y maestros que hemos prestado nuestros servicios en diversas partes de España y en Alcorcón, estamos abiertos al encuentro con aquellos que han formado parte de nuestra profesión, aportando entre todos iniciativas y colaboración para que veamos la vida de una forma lúdica y positiva. Podríamos reafirmar la premisa de que la “jubilación no es retiro” y debemos permanecer activos física y mentalmente.
De aquí nuestra apertura a todos los vecinos de Alcorcón, en colaboración con instituciones públicas tanto municipales como regionales, así como con entidades privadas. Perseguimos objetivos específicos que, a través de hechos culturales principalmente y del progresivo aprendizaje en las nuevas tecnologías, nos permitan como jubilados, seguir la dinámica social de nuestro tiempo.
Entre las actividades que impulsamos para todos los socios e invitados, destacaría las reuniones y actividades formativas que desarrollamos todos los jueves por la tarde en un aula del centro cívico Viñagrande, de Alcorcón. En ellas desarrollamos diversas actividades de tipo cultural, orientadas a la formación de los socios: conferencias, encuentros literarios, proyecciones de vídeos y fotos y cineforum. Además, con frecuencia también asistimos a los diferentes actos programados por el ayuntamiento en el auditorio. Por otro lado, es muy relevante la participación que tenemos en el podcast de Radio Mayor Alcorcón y el Grupo de Teatro Leido, formado por miembros de AJEA, que se reúnen todos los martes por la tarde para ensayar sus representaciones.
Por último, me gustaría destacar el grupo de voluntariado que coordina AJEA. Nuestros socios voluntarios participan en clases de Alfabetización de adultos en el centro municipal de mayores de Polvoranca; en clases de inglés en el centro cívico Viñagrande, ayudan en la organización de la biblioteca del centro de mayores de la Comunidad de Madrid, así como en la biblioteca de la Escuela de Idiomas en Alcorcón; y también colaboran con el Banco de Alimentos de Alcorcón.
P.- Los profesores aportan un gran valor y conocimiento a la sociedad. ¿Cree que está suficientemente reconocida la labor de los profesores?
R.- En pocas palabras, pienso que no está reconocida la labor docente como se merecería.
Lo primero que hay que mencionar a la hora de hablar de reconocimiento y prestigio social es que este concepto, el de prestigio, es intangible y, por tanto, realmente difícil de medir. En la medición del estatus de una profesión intervienen muchos factores subjetivos y dependientes del individuo que dificultan la obtención de un resultado exacto.
Según Ortega & Velasco, la estima de que goza una profesión, por lo que tiene de componente subjetivo, depende estrechamente de las referentes que en cada ocasión se utilizan. La mayoría de los españoles cree que el prestigio de los profesores ha disminuido en las últimas décadas. Además, son los propios docentes quienes más insisten y propagan esta creencia.
Sin embargo, ¿es así? ¿existe realmente un desprestigio de la profesión docente en España? Hay que considerar tres aspectos clave: formación, selección y evaluación del profesorado.
Resulta evidente, por tanto, que la mejora del prestigio de la profesión docente repercutiría positivamente en la calidad educativa, ya que se podría contar con enseñantes mejor preparados que, además, gozarían de un mucho mayor grado de apoyo social en el desempeño de su labor.
A modo de conclusión, merece la pena comentar que, si bien pueden existir diferentes puntos de vista en torno a la existencia o no de un desprestigio de los docentes, o acerca de si se deben tomar unas u otras medidas para aumentar este reconocimiento, lo que no alberga ningún tipo de duda y nos permite ponernos a todos de acuerdo es que alcanzar un mayor grado de prestigio de la profesión docente sería positivo para cualquier sociedad que, como la nuestra, conciba a la educación como uno de sus pilares básicos
P.- ¿Cree que es positivo que la ley de jubilación permita seguir trabajando después de los 65 años a los docentes que así lo decidan?
R.- Estoy totalmente de acuerdo que la ley permita seguir trabajando a los docentes que elijan esta modalidad. De hecho ya se permite continuar en activo hasta los 70 años a quienes estén bien de salud y lo decidan.
Poder trabajar después de la jubilación, o lo que es lo mismo, la posibilidad de compatibilizar jubilación y trabajo, es una de las soluciones que se manejan para avanzar hacia la sostenibilidad del sistema público de pensiones.
Además de fomentar el envejecimiento activo, estar jubilado y trabajando al mismo tiempo contribuye a contener el gasto en pensiones y permite también no interrumpir por completo la carrera profesional. En los últimos años, las opciones para compatibilizar el cobro de la pensión y el trabajo han aumentado.
Jubilación activa, flexible y parcial son tres modalidades pensadas para situaciones diferentes, pero con resultados similares: permiten trabajar después de la jubilación, es decir, seguir trabajando al tiempo que se cobra parte de la pensión de jubilación.
P.- ¿Qué mejoras se deberían introducir en las condiciones de jubilación de los profesores?
R.- Creo que es necesaria una mayor flexibilidad de elección a la hora de escoger su plan de jubilación, ya que el retiro de los profesores funcionarios tiene unas características específicas que hay que tener en cuenta a la hora de planificar la jubilación.
A efectos de pensiones, el personal docente de la enseñanza pública puede estar adscrito al Régimen Especial de las Clases Pasivas del Estado, dependiente del Ministerio de Hacienda, si accedieron al funcionariado antes del 31 de diciembre de 2010; o al Régimen General de la Seguridad Social, como el resto de trabajadores en España, si dicho acceso se produjo a partir del 1 de enero de 2011. Creo que se debería permitir a todos acceder al régimen especial de Clases Pasivas, puesto que, si no se refleja en la ley, acabará desapareciendo.
P.- ¿Considera que la educación ha evolucionado mucho en las últimas décadas?
R.- Sí. Principalmente lo que ha cambiado es el método de aprendizaje y las nuevas tecnologías.
En cuanto al método de aprendizaje, hace años la enseñanza se basaba en su mayoría en la teoría, sin prestar mucha atención a la práctica. De este modo los alumnos repetían la lección, es decir, la memorizaban, pero no la interiorizaban. No comprendían lo que repetían. El método de enseñanza en la escuela tradicional es totalmente expositivo y mecánico. A esto se sumaba la figura del profesor, en la que ésta tenía mucha más autoridad, y en el que el diálogo entre alumno y tutor era escaso.
La educación ha cambiado conforme han evolucionado el internet y las tecnologías de información y comunicación (TIC), originando un cambio de paradigma educativo el cuál algunos colegios y universidades lo han comenzado a utilizar como una nueva estrategia en el proceso de enseñanza y aprendizaje
Actualmente la educación es mucho más participativa y práctica, el docente y el alumno son dos actores que están al mismo nivel. Esto es motivo de grandes polémicas, pero yo estoy totalmente a favor de que el método de aprendizaje busque la participación, motivación y el incentivo del alumno.
Otro cambio muy visual son los edificios que acogen la educación. Aulas, materiales, disposición de las zonas,... han tenido una mejora continua en la que la tecnología es la protagonista. Ahora los docentes tienen aulas virtuales con pizarras electrónicas, proyectores integrados, y punteros en vez de tizas. Los profesores se relacionan con los padres, no mediante notas sino correos electrónicos.
En definitiva, no cabe duda de que la escuela de hoy, nada tiene que ver con la de otras décadas, los cambios son evidentes y están fuertemente ligados a los avances de la sociedad.
P.- ¿Cómo se puede promover desde las aulas respeto hacia las personas mayores? Es decir, ¿qué consejos daría para erradicar el edadismo desde la educación?
R.- Una de las soluciones para eliminar los estereotipos y la reticencia con respecto al envejecimiento es promover una cultura que aprecie las habilidades de los trabajadores de mayor edad mediante el desarrollo de actividades basadas en la transferencia de conocimiento, como la mentorización.
Desde las aulas se puede y se debe organizar talleres a nivel de centro y a nivel del profesor. Informar y formar a los alumnos para que comprendan que: el envejecimiento es una etapa más de la vida; los cambios debidos a la edad deben ser objeto de respeto y de reconocimiento de la diversidad, desterrando los conceptos negativos y estereotipados; promover campañas de sensibilización sobre lo valioso de las personas mayores; impulsar la participación de este colectivo en la sociedad; evitar el uso del lenguaje estigmatizante; así como dialogar y reflexionar sobre el buen trato que merecen las personas mayores cuando las cuidamos.
P.- ¿Qué proyectos tienen previsto realizar a medio plazo?
R.- Nuestra misión es promover todo tipo de iniciativas y actividades que favorezcan a los mayores tales como cuidados, soledad y digitalización y en eso basamos los proyectos que desarrollamos. En este sentido, queremos continuar impulsando la formación digital, para ayudar a los docentes a adaptarse a las nuevas tecnologías; seguir ofreciendo las actividades sugeridas por los socios, como talleres para mantenerse activos física y mentalmente, colaborar en actividades programadas por otras entidades sociales, culturales o deportivas; así como por ayuntamientos o la Comunidad de Madrid.
Además, tenemos previsto participar en proyectos de Erasmus para mayores europeos, para fomentar el envejecimiento activo y saludable; y en otros programas como Radars, un buen ejemplo de economía colaborativa; Covirán; Vincles BCN, o Stimulus: una plataforma que promueve la salud holística.