Esperanza Vázquez: “Dentro del marco de Fitecu, apostamos por modernizar los servicios sociales a través de la tecnología y la IA”

Esperanza Vázquez, gerente de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, fue la encargada de moderar una interesante mesa de reflexión sobre ‘Hacia dónde se proyectan las políticas públicas de cuidados a nivel internacional’.
En este contexto, Castilla y León simboliza un ejemplo a seguir nuestro país, algo en lo que también incidió el presidente de la Junta, Fernández Mañueco, quien recordó que Castilla y León tiene la mejor dotación de España tanto en plazas residenciales totales como en plazas con financiación pública. Y así también lo avala el recientemente publicado XXV Observatorio de la Dependencia, elaborado por la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, en la que esta comunidad revalida, y ya son 15 años en lo más alto, el liderazgo estatal en lo que respecta a la atención a la dependencia. Esta solidez del sistema autonómico no es casual.
Para la gerente, responde a que “los servicios sociales de Castilla y León se han construido bajo una base muy sólida. Lo que se ha buscado siempre es trabajar en red, que no vaya la Junta por sí sola, sino en colaboración con las corporaciones locales, con los CEAS que son la puerta de entrada a los servicios sociales, y luego, una buena relación con las entidades del tercer sector y con las empresas vinculadas con los servicios sociales”.
Un ejemplo de este trabajo colaborativo y de la buena sintonía también lo es esta feria. “Dentro del marco de Fitecu, lo que apostamos es por modernizar los servicios sociales a través de la tecnología y la inteligencia artificial, sobre todo, con dos objetivos: mejorar la calidad de vida de las personas mayores o con dependencia, y facilitar la labor a los profesionales”, señaló Vázquez. La labor es ardua si tenemos en cuenta que esta región tiene un reto muy importante, señala la gerente, “como lo es la dispersión geográfica y sus más de 2.200 municipios pequeñitos, en los que hay que abordar, sobre todo, la soledad de los mayores”.
A gusto en casa, Intecum y la Teleasistencia Avanzada son ya proyectos consolidados en ese “camino hacia la desinstitucionalización, hacia la atención personalizada en los domicilios, que a través del uso de las tecnologías, acompañados de los grandes y cualificados profesionales que tenemos, permita centrarse en las personas, en los usuarios, para que tengan una calidad de vida, un envejecimiento activo y llegar a todos los rincones”, concluye Esperanza Vázquez.