PREGUNTA.- La cultura o el arte no solo se consume, también puede ser una práctica activa y serlo, por supuesto, a cualquier edad. Un ejemplo de esto es el concurso de creatividad para personas mayores de 75 años que lanzaron en Cultura Inquieta a finales del año pasado, ‘Arte mayor’, o el par de ediciones celebradas del concurso de cartas manuscritas para mayores de 65 años, ‘Palabras mayores’. ¿Por qué apeláis en la plataforma directamente al público sénior?
RESPUESTA.- Porque sabemos que tienen mucho que contar y que ofrecer y que es un sector de nuestra sociedad tan importante, como invisible, por desgracia.
Creemos que es un regalo para la sociedad girar el foco y ponerlo en su experiencia, en su manera de mirar la vida, en sus valores y en su creatividad.
Queremos conectar con su lado creativo y humano, que son infinitos. Es muy enriquecedor y emocionante para nosotros, el equipo de Cultura Inquieta, vivir cada acción que realizamos con mayores, es un verdadero privilegio.
P.- Cultura Inquieta lleva 14 años en activo como plataforma creativa que “da visibilidad y voz al talento”, como vosotros decís, y que, sobre todo, se mueve por redes y genera contenido cultural por Internet. ¿Qué porcentaje de vuestra audiencia –sean lectores o followers en redes– pertenecen al colectivo sénior (mayores de 65 años)?
R.- Estamos comprobando que, cada vez más, los mayores utilizan las redes sociales para estar conectados. Aunque el aumento es notable, sigue siendo un sector menor.
Pero hay que matizar que depende del medio; quizá en Facebook tenemos una muestra más relevante, pero hay otras redes, como son Instagram o TikTok, donde el porcentaje es muy pequeño (alrededor de un 2%) de nuestros seguidores.
En un mundo hiperconectado, nuestro objetivo con las acciones dirigidas a un público sénior es desvirtualizar, ponernos caras, sacar sus talentos a la calle y compartirlos con el resto del mundo. Eso lo hacemos con eventos reales, como exposiciones de arte, que han sido el colofón a una acción previa en redes sociales. Este sería el objetivo final, aunque no todas las veces es posible.
P.- En este sentido, ¿notáis diferencias en el tipo de contenidos que leen vuestros lectores en relación a su edad? ¿Tenéis en cuenta la edad de vuestro público a la hora de plantear un contenido en la web o en redes como Instagram, por ejemplo?
R.- Cada uno de los canales que utilizamos para comunicar tiene sus propios códigos, público y necesidades.
Es cierto que, como comentaba anteriormente, redes como Instagram o TikTok suelen ser territorio de las generaciones más jóvenes (sobre todo TikTok) y, dentro de nuestra línea editorial, solemos abordar temas que consideramos que son más interesantes para esta parte representativa de la sociedad.
En Facebook y en la web, mantenemos contenidos que consideramos “universales” de pensamiento, de arte, fotografía u opinión que entendemos son atractivos para todas las edades.