La asociación de empresas de gestión de centros asistenciales GESCA destacó que la atención residencial a las personas dependientes en Bizkaia “no existiría sin la inversión de los gestores privados que han apostado por la creación de la actual red de residencias privadas, que suponen más del 90% de las plazas residenciales, lo que ha supuesto una inversión de más de 900 millones de euros”.

Así se pronunció la asociación en un desayuno organizado, recientemente, con los medios en la Residencia Domus Vi Sarrikue, en Bilbao, para presentar las condiciones laborales del personal que trabaja en centros residenciales privados en Bizkaia tras la firma del convenio, en noviembre, así como para analizar las plantillas profesionales que trabajan en los centros.

Con la firma del convenio –y los que le han precedido en 2018, 2014, 2011, 2006 y 2003–, se reafirma la voluntad de las patronales vizcaínas “por la creación de unas condiciones laborales que reconozcan el gran trabajo que realizan las profesionales que trabajan en los centros vizcaínos”. Desde GESCA aseguraron que es necesario avanzar hacia “un nuevo modelo de relaciones laborales, donde el objetivo sea la mejora en la atención residencial y no se circunscriba a la negociación y firma de las mejoras del convenio laboral”.

En la entidad recalcaron que las características y necesidades de las personas atendidas en los centros residenciales han cambiado “sustancialmente en los últimos 20 años”, lo que ha requerido de “una constante adaptación por parte de las entidades gestoras, un cambio que seguirá produciéndose en los próximos años”.

“La colaboración púbico-privada ha sido, es y será imprescindible para poder atender las crecientes necesidades de atención sociosanitaria”, insistieron desde la asociación.

El convenio afecta a 262 centros en el territorio, los cuales atienden a más de 12.800 personas mayores y en los que trabajan más de 6.600 personas, con un porcentaje de mujeres superior al 80%.

El convenio recoge las tablas salariales hasta 2025, donde se acuerda un incremento del 23,5% en un período de cinco años. En comparación con el convenio estatal, el salario de una gerocultora es un 43,9% superior en Bizkaia. 

Es importante subrayar que, en el periodo comprendido entre 2003-2023, los salarios del personal que trabaja en centros para mayores se han incrementado en un 120,40%, alcanzando el 140,87% si se tiene en cuenta la reducción de jornada que se ha producido.

Al igual que en los anteriores convenios, la jornada laboral anual máxima sigue siendo de 1.592 horas, de las cuales 1.572 se destinan a la jornada habitual y 20 para la formación continua.