Laboratorios farmacéuticos ROVI ha celebrado, este semana, su Junta General Ordinaria de Accionistas en la que ha aprobado las cuentas anuales del ejercicio 2024, en las que ROVI rebaja sus ingresos operativos consolidados de 763,7 millones de euros, lo que supuso un 7,9% menos que en 2023.

No obstante, pese a que ROVI rebaja sus ingresos en el ejercicio, la compañía logró que el margen bruto aumentase en 3,7 puntos porcentuales hasta el 62,7%.

Juan López-Belmonte Encina, presidente y consejero delegado de ROVI, ha declarado que 2024 ha sido “un año de transición clave para establecer las bases de nuestro futuro”. “Nos hemos centrado –continuó– en fortalecer nuestra capacidad en el área de fabricación a terceros para abordar el desequilibrio entre la creciente demanda y la oferta limitada de capacidades de producción de inyectables”.

El respaldo de la Junta contribuye a mantener la actual estrategia de crecimiento para el largo plazo. ROVI prevé aumentar sus ingresos operativos de entre 1,5 y 1,8 veces en 2030. Actualmente, la farmacéutica está invirtiendo para ampliar las capacidades de su negocio de fabricación a terceros con el fin de hacer frente al actual desequilibrio entre la oferta y la demanda que presenta este mercado a escala global. En concreto, se espera que el impulso de los ingresos del grupo provenga principalmente del negocio de fabricación a terceros, el cual se prevé que duplique sus ventas hasta los 700 millones de euros aproximadamente en 2030.

En términos de rentabilidad, la farmacéutica estima que multiplicará entre un 2,5 y un 2,8 su EBITDA antes de los gastos de I+D en 2030 respecto a 2024, derivado de una mejora en sus márgenes operativos en los próximos seis años. Para sustentar su innovadora cartera de productos, la compañía planea destinar una inversión media anual de entre 40 y 60 millones de euros en investigación y desarrollo en los próximos seis años (2025-2030, ambos incluidos).