El próximo 30 de octubre arrancará la segunda fase del llamado ‘Pacto Vasco de Salud‘, tras cumplirse la segunda última reunión entre los agentes participantes, esta vez en torno al diagnóstico, y en la que el Gobierno Vasco destacó el “amplio consenso”.

Ahora, el próximo objetivo, señalaba desde el Ejecutivo, será definir los principios sobre los que, posteriormente, se asentarán las estrategias y acciones de futuro, en lo que constituyen las cuatro fases establecidas “para transitar hacia un nuevo paradigma de sistema de salud más proactivo, preventivo, integrado y comunitario”.

El consejero de Salud, Alberto Martínez, fue el encargado de presidir, la semana pasada, en Donosti, la segunda reunión de la Mesa del Pacto Vasco de Salud, junto a los principales agentes sociales, políticos y sanitarios de Euskadi. En esta segunda sesión de trabajo, que se celebró en el edificio de Biogipuzkoa de la capital donostiarra, ha habido nuevas incorporaciones: el sindicato ESK, la Federación de Euskadi de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental (Fedeafes), el Colegio Oficial de Ópticos y Optometristas, y el sindicato de técnicos de enfermería SAE.

DIAGNÓSTICO Y ÁMBITOS DE REFLEXIÓN

El doctor en medicina y catedrático de Farmacología en la UPV/EHU, Javier Meana, coordinador de los trabajos de la Mesa, expuso los principales aspectos del diagnóstico, al que más tarde se añadieron las aportaciones realizadas por los miembros de la Mesa. El documento resultante analiza siete aspectos concretos: el diagnóstico demográfico; la morbilidad y mortalidad; los determinantes sociales y estilos de vida; los recursos asistenciales y uso; el contexto social y tecnológico; los recursos económicos; y la experiencia de la ciudadanía.

El propio Meana explicó que, además de las aportaciones incorporadas al diagnóstico, se han recabado otras muchas relacionadas con la fase número tres, la correspondiente a las estrategias. Precisamente para abordarlas, se ha optado metodológicamente por distinguir seis ámbitos de reflexión: salud y demanda de la ciudadanía; calidad y seguridad; profesionales; información; sector Sanitario como creador de valor o motor de crecimiento económico; y modernización de las infraestructuras sanitarias.

En principio, la previsión es que en marzo de l próximo año pueda estar ya plenamente operativo el ‘Pacto Vasco de Salud’, que pretende asegurar el acceso universal, mejorar la calidad asistencial, conseguir un sistema sostenible, mayor participación ciudadana e impulsar la prevención y promoción de la salud.