Amalia es una mujer de 77 años que vive sola, pues se quedó viuda hace ya una década. Por cuestiones de trabajo, su hija debe irse a vivir al extranjero, así que, para asegurarse de que su madre queda en buenas manos, decide internarla en una residencia, a pesar de que a esta no le apetezca demasiado la idea. Este es el punto de partida de ‘Tercera Edad’, un cortometraje que se está rodando actualmente bajo la dirección de Octavio Lasheras y el guión de Anna Utrecht. La película narra las aventuras y desventuras de Amalia en el centro residencial en el que empieza a vivir, donde conoce a otras personas mayores que tienen muchas ganas de disfrutar de la vida.
LA IDEA
En el mundo del cine parece que se suelen preferir historias sobre jóvenes, antes que sobre personas mayores, sin embargo, Utrecht y Lasheras decidieron hacer una película con el colectivo senior como protagonista. La guionista, que también es la directora de producción del cortometraje, afirma que la elección del tema estuvo motivada “por la necesidad de contar estas historias que ves que pasan en tu entorno cercano. Son cosas que necesitas expresar”. “Además queríamos darle un toque diferente, porque la gente cuando oye la palabra tercera edad se piensa que va a ser todo un gran drama. Lo que queremos es dar a conocer las situaciones reales y actuales de las personas mayores, que no son como las que hemos podido conocer 10 o 20 años atrás”, asegura Anna Utrecht.
Con la obra, explica, “queremos mostrar ese cambio que ha habido de mentalidad de nuestros mayores. Y es que no es lo mismo lo que han vivido nuestros abuelos, que lo que han vivido nuestros padres. A diferencia de los primeros, los mayores de ahora suelen tener una mentalidad de mayor disfrute de la vida, de hacer más cosas y de intentar no sentirse excluidos y aportar algo a la sociedad”. Y es que, según dice, “ahora a los 70 y los 80 años ya no son personas mayores. Son personas vitales que, además, vuelven a tener esa adolescencia de volver a querer descubrir cosas nuevas y de sentirse vivos de nuevo”.
Asimismo, comenta, con esta película buscan mostrar que la vida en las residencias puede ser realmente positiva, pues “allí los senior se ayudan mutuamente”. “También queremos dar valor a la labor de los que les cuidan, los que hacen posible que los mayores tengan una vida mejor”, declara.
ELENCO DE LUJO
“Yo soy representante de actores y actrices. Muchos de ellos son mayores, y veo que estos son perfiles que están abandonados. Puntualmente les llaman para actuar, pero sus personajes no tienen continuidad. Los utilizan para momentos concretos y luego les dejan apartados”, asegura la guionista. “Esta película es una manera de tener a mis actores en activo, que ellos sientan que aún tienen mucho que aportar como profesionales”, explica.
Es por todo esto que el elenco artístico principal de esta película lo componen artistas totalmente consagrados del cine español: María José Alfonso –en el papel de Amalia–, Silvia Casanova, Guillermo Montesinos, Carlos Manuel Díaz, Manolo Zarzo, Jesús Guzmán, Máximo Valverde, Tony Antonio, María Gracia, Mariano Venancio, Olga María Ramos y, el más joven del grupo, Pablo Castañón.
“El ‘problema’ de las personas mayores es que ellas no se ven mayores. La verdad es que en cuanto les mandé el guión y el dossier y vieron las personas que participaban, enseguida me dijeron que sí, porque les parece un tema muy interesante”, asegura Anna Utrecht.
Sin embargo, hace hincapié en que “el cortometraje no es que esté hecho especialmente para un público mayor”, aunque, como dice, “sí sabemos por estadísticas que un alto porcentaje de personas que van al cine tienen más de 60 años. Esta es gente a la que le va a encantar ver a actores de toda la vida”.
La guionista afirma que “todos estos actores y actrices son personas muy vitales y que han estado encantados desde el principio en participar en la película. De lo que sí se quejan es de que se les hace corto y de que les gustaría trabajar mucho más. Todos quieren tener mucha participación. Pero bueno, si este corto crece y tenemos la oportunidad de hacer un largometraje o una serie, también estaríamos animados a que existiera una continuidad. Eso sí, aunque ahora mismo este sea un cortometraje, nosotros ponemos el alma como si fuera un largo”.
Pablo Castañón, que interpreta a Arturo, el ex-yerno de Amalia, afronta este proyecto “con ganas e ilusión. Es una historia necesaria de contar y formar parte de un elenco de este nivel hace que me sienta muy motivado”. Por su parte, María José Alfonso, dice que “estar al lado de compañeros de profesión de toda la vida, y de gente joven, tanto en el reparto, como el equipo técnico, es una bonita experiencia, y más, para contar una historia así. Sobre todo tenemos mucha ilusión, que es algo, que jamás se debería perder en la vida, te dediques a lo que te dediques”.
Mariano Venancio, que interpreta a Ángel, el médico de la residencia, coincide con sus compañeros: “Formar parte del elenco de ‘Tercera Edad’ no es solo positivo, sino ilusionante, porque realizar un trabajo creativo con gran parte de tus compañeros de promoción o cercanos a ella y todos con una enorme carrera a sus espaldas es como cumplir un sueño pocas veces realizable.
UNA HISTORIA CON MENSAJE
Anna Utrecht explica que con esta película quieren transmitir varios mensajes: “Que estar en una residencia no es tan malo como muchos piensan, que hay vida más allá de estos lugares, que todas las personas que atienden a los mayores están muy preparadas y capacitadas, y reflejar ese ánimo a los hijos, a esas personas que los tienen que llevar a los centros, pues ellos también lo pasan fatal”.
“Al conocer historias de personas que tienen que llevar a sus mayores a vivir a residencias, vemos lo importante que es también reflejar ese sufrimiento común de todos los hijos que se ven en situaciones de este tipo. Con esta película queremos darles ánimo. Hay algunas personas mayores que no se enteran de lo que les está ocurriendo y otras que sí, pero los hijos son conscientes siempre. Queremos que estos se vean reflejados en el corto, que vean que hay más personas que sufren por ello. No están solos y no deben sentirse mal”, afirma la guionista.
Como dice, “en ‘Tercera Edad’ la protagonista, Amalia, se encuentra bien, pero su hija tiene miedo de dejarla sola. Es por eso que decide que es momento de llevarla a vivir a una residencia. Después Amalia está muy bien en ella, ha conocido a buenos compañeros y está bien cuidada. En el centro hacen cosas, salen, van a museos, bailan…”. Asimismo, Utrecht declara que, tanto en la película como en la vida real, cuando suceden este tipo de situaciones, “también se ve el amor de esas madres y esos padres, su sacrificio. Amalia, por hacer feliz a su hija, decide quedarse en la residencia, aceptar su nueva situación”.
Como señalaba anteriormente, en esta película también se busca combatir la imagen de los mayores como agentes pasivos. Se trata de echar abajo estereotipos y demostrar que el perfil senior actual es activo y son personas que se ilusionan por la vida. En este sentido, Pablo Castañón afirma que “mientras te puedas mover la pasividad no existe. Se trata de conciencia. Tengo la impresión de que en cuanto aparece algo nuevo es como si lo que estaba antes dejase de existir, llegando a suceder también con las personas. Cada vez existen más iniciativas para que esto no ocurra y ‘Tercera Edad’ es un fiel reflejo de ello. No hay que olvidar que la vida sigue, que no finaliza por llegar a una determinada edad”.
María José Alfonso añade: “Me entristece que se piense en los mayores como personas no válidas en nuestra sociedad, cuando todavía podemos dar mucho. El ver como ahora las residencias tratan a las personas que ya no pueden valerse, con cariño y profesionalidad, te da seguridad y te quita de la cabeza esa imagen de los abuelos dejados de cualquier manera. También admiro a esos mayores que ayudan a sus hijos con los nietos y que llevan una vida normal, con ocio, cultura y en muchos casos, ayudando a otros”. Mariano Venancio también se muestra en desacuerdo con que a los mayores se les mire como agentes pasivos de la sociedad: “Es fácil echar un vistazo a la edad de los grandes creadores, en cualquier faceta de la vida, y percatarnos de que sus grandes obras han surgido en esa etapa llamada tercera edad. Todo un cúmulo de experiencia arropada por una desarrollada paciencia dan como resultado una cesta de frutos en su justa madurez”.
VOCACIÓN SOLIDARIA Y PATROCINIO
El 10% de lo que esta película recaude en los premios que logre se donará al Hogar Nazaret (Perú) para niños que se encuentran en situación de desamparo. Es por ello que, como dice el equipo de ‘Tercera Edad’, este es “un proyecto de mayores para ayudar a los más pequeños”.
La película se está financiando por varias vías. “Se han solicitado ayudas a la Comunidad de Madrid, al ICAA (Ministerio de Cultura) y a patrocinadores para la remuneración de actores y técnicos, gastos de producción, alquiler equipo y para la postproducción”, aseguran.
Concretamente, estas entidades que están prestando su apoyo y colaboran con el film son: residencia Los Nogales Puerta de Hierro –que se está empleando como plató para gran parte del rodaje–, Film Madrid, OneMadrid, Óptica Utebo, Discarlux, Asociación Cultural y Audiovisual 7º Arte, FishGourmet, Belmonte Arte, restaurante Barro Cocido y el periódico entremayores.
Asimismo, se inició una campaña en Verkami, plataforma online dedicada al micromecenazgo. De esta manera, los particulares interesados pueden hacer aportaciones económicas. Estas donaciones se están destinando a pagar la Seguridad Social de los actores y técnicos durante los días de rodaje.
Con el fin de mostrar su agradecimiento por las ayudas económicas concedidas, se ofrecen recompensas que varían en función de la cuantía aportada y que van desde la aparición en los títulos de crédito, hasta la concesión de invitaciones para el estreno en Madrid, una cena para con actores principales o la posibilidad de aparecer como figurante.