Con una disminución del 30% en la participación debido a la pandemia de Covid-19, Catalunya celebró ayer unas elecciones que abren la puerta a varias posibilidades de Govern, si bien la que tiene más posibilidades es la coalición independentista.
El partido que obtuvo más votos fue el PSC, con más de 630.000. Sin embargo, ERC, con 45.000 menos, consiguió el mismo número de escaños, 33. Detrás de este empate, se sitúa Junts per Catalunya, con 32 escaños, e inmediatamente después, irrumpe Vox en el escenario por primera vez en esta comunidad, ya con 11 escaños y más de 200.000 votos en todo el territorio.
Por debajo de VOX, quedó la CUP (nueve escaños); En Comú Podem (ocho escaños), Ciutadans (seis escaños) y, por último el Partido Popular, con tres escaños que consiguió arañar solamente en la provincia de Barcelona.
En definitiva, el cabeza de lista del PSC y exministro de Sanidad, Salvador Illa, se coloca como ganador de la jornada y ya ha afirmado que se pondrá en contacto con todos los partidos excepto Vox para tratar de formar gobierno, si bien el candidato de ERC, Pere Aragonés, ha anunciado que también se presentará a la investidura. Lo único que se puede confirmar es que serán necesarios al menos tres partidos para formar un nuevo Govern.
DESAFÍOS DEL NUEVO GOVERN
A falta de investidura, de carteras y de titulares de las carteras, solo queda conocer cuáles son las demandas del sector al futuro Govern.
La Coordinadora de Residencias 5+1 ha hecho hasta diez peticiones a los partidos políticos, entre ellas, la modificación de la Cartera de Servicios de 2010 –demanda histórica entre las entidades de atención a las personas mayores– para modificar la ratio del personal gerocultor, entre otras cuestiones; dotar a las residencias de equipamiento médico (como electrocardiogramas); revertir la privatización de la gestión residencial; garantizar unas inspecciones “reales y sin previos”, mayores sanciones ante el maltrato hacia los usuarios, etcétera.
Por su parte, la Fatec se reunió con “todos los partidos políticos que se presentan a estos comicios”, a quienes expusieron sus reivindicaciones, que son siete: fortalecer los derechos de los mayores frente al edadismo, garantizar un enfoque de ciclo vital en el ámbito laboral, asegurar ingresos adecuados en la vejez, proteger la dignidad en el envejecimiento a través de un sistema de salud centrado en la persona, asegurar una vida sana, impulsar el acceso al ámbito digital sin excluir a los mayores y empoderarlas para que participen plenamente en la vida social y democrática.