La PMP reclama mayores recursos para el definitivo desarrollo de la Ley de Dependencia
Con motivo de la conmemoración, el 29 de octubre, del Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) ha reivindicado el derecho de las personas en situación de dependencia a recibir cuidados dignos a lo largo de toda la vida, así como ha urgido al definitivo y rápido desarrollo y perfeccionamiento de la Ley de Dependencia, para que prestaciones y recursos de calidad lleguen a las personas y las familias que los necesiten de manera integral y personalizada.
Así, La PMP ha recordado que el crecimiento de la longevidad es un éxito, ya que implica que las personas vivan más años con buena calidad de vida. Sin embargo, este cambio demográfico también supone un incremento del número de personas de edad muy avanzada con necesidad de cuidados de larga duración (CLD), lo cual, junto con el sostenimiento de las pensiones, supone uno de los mayores retos de las sociedades modernas.
En este sentido, con la aprobación de la ley en 2006, España dio un paso importante al unirse a los países que habían regulado como derecho el acceso a prestaciones a las personas que precisen cuidados. Sin embargo, la Plataforma ha recalcado que es necesario “renovar la reivindicación de este derecho y perfeccionar la LAPAD para que las prestaciones y recursos adecuados a lo que las personas mayores necesitamos y queremos lleguen a las personas que precisan cuidados y a sus familias de manera integral y personalizada”, según ha manifestado Pilar Rodríguez, presidenta de la Comisión de Cuidados de la PMP.
Asimismo, en el ámbito internacional hace tiempo que se viene afrontando el mencionado reto con iniciativas como ‘La Década de envejecimiento saludable (2021-2030)’ de la OMS o la ‘Estrategia Europea de Cuidados’, mediante las que se pide que los diferentes países garanticen unos servicios asistenciales de calidad, asequibles y accesibles, así como mejorar la situación tanto de las personas cuidadoras (profesionales o informales) como de quienes son receptoras de cuidados. Siguiendo esta línea, el Gobierno de España ha aprobado recientemente la ‘Estrategia Estatal para un nuevo modelo de cuidados en la comunidad (2024-2030)’, basada en cinco ejes fundamentales: prevención de dinámicas de institucionalización, participación de las personas y concienciación social; transformación de los modelos de cuidado y apoyo; desarrollo de servicios para la transición hacia la vida en la comunidad; condiciones habilitadoras para la desinstitucionalización.
ÁREAS DE TRABAJO PARA MEJORAR LOS CLD
La PMP había reclamado dicha Estrategia Estatal durante largo tiempo y celebró su definitiva aprobación, pero ha recordado que, para su implementación y la obtención de los resultados deseados, se requiere del trabajo y la toma de medidas urgentes en numerosas áreas, como son, entre otras, la atención domiciliaria, para conseguir que esta sea “integral, continuada, eficiente y centrada en las personas”; el apoyo a las familias cuidadoras, en especial las mujeres (que son las que en mayor medida “cargan” con el peso de los cuidados); la atención en las residencias, que deben transformarse hacia un modelo hogar, al tiempo que se invierte en otros modelos de alojamiento (apartamentos con servicios, viviendas compartidas o colaborativas, tipo cohousing…); el uso de la tecnología, también centrada en las personas, sin olvidar un verdadero impulso a la coordinación sociosanitaria.
Asimismo, Rodríguez ha señalado que para conseguir que todo este trabajo alcance sus objetivos necesita de un verdadero compromiso de los poderes públicos por ampliar “la financiación, porque, aun reconociendo que en los últimos años se ha hecho un esfuerzo presupuestario mayor, si no se incrementa la inversión en cuidados de larga duración hasta llegar, al menos, a un 1,5% del PIB, tal como venimos reclamando desde la PMP, todas las propuestas y estrategias que se vienen lanzando se convertirán en papel mojado”.
Finalmente, Rodríguez ha insistido en que “debemos contribuir a una mayor sensibilización social respecto al valor de los cuidados en su conjunto y respecto a la necesidad de transformar el modelo actual de atención”, ya que “la ética, sus principios y la dignidad inherente a todas las personas, junto al enfoque de derechos, deben ser los entramados en los que asentar el futuro de los cuidados”. “Se trata de un modelo de país que concierne a la sociedad entera, no solo a las familias y a los equipos de profesionales”, ha concluido Rodríguez.