El sector del seguro analiza y debate sobre la sostenibilidad del sistema
En la presentación participaron el director general de Fundación Mapfre, Julio Domingo; el director general del Servicio de Estudios de Mapfre, Manuel Aguilera, y la presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos.
El estudio analiza los principales modelos de pensiones, incluyendo el español, y cómo se han ido reformando cada uno de ellos para encajar en su sostenibilidad del impacto de los movimientos demográficos y, muy especialmente, el del envejecimiento poblacional. En concreto, además del español, también se han analizado los sistemas de pensiones de Estados Unidos, Reino Unido, Suecia, Holanda y Chile.
En general, los seis modelos analizados actúan o han actuado sobre tres variables y bajo un principio general.
Las tres reformas más comunes han sido retrasar la edad de jubilación, que tiene el doble efecto de incrementar los ingresos del sistema y reducir el coste ya que el jubilado cobrará menos años su pensión; aumentar los incentivos fiscales, e incrementar el ahorro voluntario, especialmente entre los trabajadores.
El Informe pone de manifiesto que los actuales sistemas de pensiones se enfrentan a la necesidad de ser reformados con el fin de garantizar su sostenibilidad y estabilidad en el largo plazo. En este sentido, apunta, además, a que no solo deben corregir los problemas de financiación derivados de la materialización de riesgos demográficos, económicos y financieros, sino que, en algunos casos, deben atender también las consecuencias no deseadas derivadas de las propias medidas que se han implementado para intentar corregirlas.
ENCUESTA NACIONAL
En la presentación también se puso en común una encuesta realizada a nivel nacional, a finales de año, para conocer la percepción de los ciudadanos en relación al ahorro, específicamente al destinado a la jubilación y, en general, sus expectativas sobre el modelo de pensiones español.
La encuesta revela que más de la mitad de los españoles (61%) están destinando al ahorro de forma recurrente una parte de los ingresos que reciben y afirman que lo hacen pensando fundamentalmente en el corto y medio plazo.
Además, la mitad de los entrevistados se declara muy preocupada por el futuro de las pensiones.
Y el 82% coincide en que la pensión no le va a permitir mantener el nivel de vida previo a la jubilación.
La encuesta también revela que la mitad de los ciudadanos (47%) sí estarían dispuestos a ahorrar mensualmente para su propia jubilación y, de nuevo, son mayoría los que destinarían un 5% de sus salario a constituir una pensión complementaria.