Pregunta.- Recientemente, la ACT firmó un acuerdo de colaboración con la Fundación ONCE con el objetivo de promover el turismo accesible en Catalunya. ¿Qué acciones llevarán a cabo para conseguir este fin?
Respuesta.-La Agència Catalana de Turisme colabora con la Fundación ONCE desde 2013. El presente, se trata de un acuerdo actualizado que seguirá facilitando a la Fundación ONCE toda la información y contenidos sobre Turismo Accesible en Catalunya para su difusión. Asimismo, se facilitará su participación en los viajes de prensa especializados en este segmento.
Por su parte, la Fundación ONCE promoverá la oferta de turismo accesible catalán a través de sus canales, que tienen un público potencial muy amplio. También participará en presentaciones conjuntas con la ACT y facilitará un acuerdo con el Grupo Hoteles Ilunion.
P.- Al mismo tiempo, la Agència Catalana de Turisme y la Fundación ONCE forman parte de la Red Europea de Turismo Accesible, organización de referencia en esta materia. ¿Qué líneas de actuación se promueven desde dicha plataforma?
R.- Aprovechando el conocimiento y la experiencia de esta red, sus miembros mejoran la accesibilidad de la información turística, el transporte, las infraestructuras, el diseño y el servicio para visitantes con cualquier tipo de necesidad, siendo un modelo de excelencia en turismo accesible para toda la industria turística.
P.- En el marco de la Feria Internacional de Turismo, Catalunya fue reconocida por su iniciativa “Turismo accesible, turismo para todo el mundo”. ¿En qué consiste este programa?
R.- El turismo accesible es una de las líneas estratégicas de trabajo de la Agència Catalana de Turisme. Desde 2007, la ACT trabaja para adecuar gran parte de la oferta turística catalana a las necesidades de este segmento.
Actualmente, el número de recursos, equipamientos y servicios turísticos que participan en el programa es de 1.230, un 50% más que cuando lo iniciamos, y el número de destinos accesibles ha aumentado de 16 a 26.
Durante Fitur, Catalunya recibió una mención especial en la categoría de Destinos por su iniciativa “Turismo accesible, turismo para todo el mundo”. 53 candidaturas de 13 países diferentes optaban a estos primeros Premios de Turismo Responsable, que tienen como objetivo reconocer la implicación de empresas y entidades turísticas que trabajan por el desarrollo y activación de un turismo que promueva unas prácticas responsables con el medio ambiente, la economía y la sociedad.
P.- El jurado valoró, entre otras cosas, que en los últimos diez años se haya conseguido incrementar el número de destinos de turismo accesible. ¿Cómo se ha conseguido llegar a este punto?
R.- El trabajo más importante que se ha realizado desde la Agència Catalana de Turisme para llegar a este punto ha sido el de concienciar y sensibilizar al sector sobre la importancia de contemplar la accesibilidad en sus estrategias de gestión.
La accesibilidad, en una gran parte del sector, era solamente vista como una cuestión normativa, sin llegar a considerar factores como el aumento de la rentabilidad, la mejora de la competitividad o la mejora de la imagen. En todos estos años, las acciones llevadas a cabo por la Agència Catalana de Turisme en materia de promoción del turismo accesible han incentivado al sector turístico catalán a mejorar sus condiciones de accesibilidad.
Otras acciones importantes que han contribuido a un aumento de la oferta turística accesible en Catalunya han sido la estructuración y ordenación del producto y las acciones formativas. La conceptualización del turismo accesible desde su implementación en todos los elementos que componen el destino, como factor intrínseco a toda su oferta, ha sido un elemento clave para llegar a este punto.
El turismo accesible no es un producto turístico, es una condición de los equipamientos, recursos o servicios turísticos. Por esta razón, la accesibilidad se está incorporando de manera transversal a todos los productos que desde la ACT estamos promocionando.
P.- ¿Cuál era la situación del turismo accesible en Catalunya hace diez años?
R.- Hace diez años, en Catalunya ya existía una cierta sensibilidad hacia este segmento desde una parte del sector turístico, sobre todo desde el sector privado, fruto de la demanda que ya existía, no solo desde el mercado español, sino sobre todo del francés.
Era una oferta muy desestructurada y, sobre todo, muy desconocida. Podía darse la paradoja de un destino desde el que despegaba el único globo adaptado de España, pero no disponía ni de alojamiento ni de transporte para llegar a este.
Durante los dos primeros años se procedió a la importante tarea de realizar un análisis exhaustivo sobre el terreno de la oferta turística accesible. Al mismo tiempo que se realizaba esta tarea también se llevó a cabo una importante labor de concienciación y asesoramiento. Poco a poco se fue agrupando esta oferta alrededor de los destinos y se fueron estableciendo las prioridades para cubrir la cadena de la experiencia turística de cada uno de ellos.
Existen ejemplos que ponen de manifiesto que el éxito de este programa se ha sustentado en gran medida en el esfuerzo y la visión de empresarios y destinos que creyeron en que el turismo accesible para todos era posible. Vol de Coloms, la primera empresa con globos aerostáticos adaptados de España; La Molina, una de las primeras estaciones de esquí accesibles a todos; o el Club Náutico de L’Escala, que desde 2008 facilitó la accesibilidad a sus equipamientos, servicios y recursos a las personas con algún tipo de discapacidad o movilidad reducida, son algunos ejemplos.
P.- ¿Qué aspectos considera que aún es preciso mejorar en este campo?
R.- Hay que seguir mejorando, queda todavía mucho trabajo por hacer. El transporte accesible es uno de los temas clave en los que seguir trabajando y mejorando.
La inclusión en la enseñanza reglada de materias relacionadas con la accesibilidad también es un factor a tener en cuenta. No olvidemos que la formación es uno de los pilares fundamentales para lograr que la accesibilidad se implemente de manera normalizada en el turismo.
También tenemos que seguir trabajando para lograr que todo el sector turístico vea el turismo accesible como un factor de rentabilidad, de competitividad y, cómo no, de responsabilidad social.
Se ha avanzado mucho pero queda trabajo por hacer y desde la Agència Catalana de Turisme seguiremos trabajando por un turismo accesible para todos.