En 2009 se aprobó la Ley de Servicios Sociales y, la semana pasada, se celebró el décimo aniversario con la presencia de la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social del Gobierno de España, Luisa Carcedo. El presidente de Aragón, Javier Lambán, explicó que los servicios sociales fueron “un hito del que estamos muy orgullosos” y que, si en la legislatura pasada “nos dedicamos, a través de la consejera María Victoria Broto, a elaborar un gran elenco de leyes, en la presente legislatura nos vamos a dedicar a desarrollar todas esa normas y leyes con la aspiración de que Aragón sea una comunidad líder en servicios sociales”.
Lambán reconoció que se ha pasado de la beneficencia al reconocimiento expreso de derechos subjetivos y exigibles incluso ante los tribunales. El presidente hizo balance de los servicios sociales, que atienden de manera intensa y permanente a unas 90.000 personas en la región, más de 250.000 han tenido algún tipo de relación con los servicios, en torno a 140.000 tienen cada año un tipo de prestación y servicio del sistema y esas son cifras muy elevadas para una comunidad autónoma como esta.
De cara a la próxima legislatura, el objetivo es seguir acomodando la prestación de los servicios sociales a las nuevas realidades, fundamentalmente relacionadas con el envejecimiento de la población, despoblación, nuevas modalidades familiares, incorporación mujer al trabajo y la necesidad de compaginar vida laboral y personal; y queremos estar a la altura de estos retos y desafíos.
Entre los retos para los próximos cuatro años, Lambán incluyó la posibilidad de que, “si seguimos con la incorporación de dependientes al ritmo que lo hemos hecho estos últimos cuatro años, en un año podía terminar definitivamente la existencia de lista de espera y todas las personas susceptibles de ser atendidas por la dependencia podían ser incorporadas”.
En la próxima legislatura "tenemos que hablar –apuntó Lambán– de ampliar los servicios dirigidos a las personas mayores, de pobreza infantil, hacer el máximo esfuerzo para mejorar la dotación de infraestructuras y residencias". En términos generales tenemos que hablar de desarrollar el amplio elenco legislativo de la pasada legislatura que era a su vez una ampliación de la Ley de Servicios Sociales que se aprobó en 2009 cuando era consejera Ana Fernández.
La ministra Carcedo no escatimó halagos a una ley “muy importante” de segunda generación, que ha sido modelo para otros territorios, que ha demostrado su razón de ser con la crisis sufrida, asegurando que si han demostrado ser la esencia “más básica” del sistema, no fue por casualidad, “sino por décadas de tantos profesionales”.