Iñigo Urkullu fue designado ayer lehendakari por la Cámara vasca.  Después de un primer día de debate de investidura en el que no consiguió la mayoría absoluta necesaria, en la segunda sesión se realizó una nueva votación en la que el candidato del PNV consiguió el respaldo de los miembros de su formación para hacerse cargo del Gobierno Vasco, 27 votos que  le han dado la mayoría simple suficiente para su designación.
En su discurso, Urkullu Urkullu destacó su compromiso por llegar a acuerdos en esta nueva legislatura, que calificó como la de "la paz y la convivencia", y expuso las principales líneas de actuación de su Gobierno, cuyos ejes fundamentales se centrarán en la creación de empleo y el crecimiento económico. No obstante, Urkullu otorgó un papel relevante a las políticas sociales, "con las que mi Gobierno va a estar comprometido desde el primer día", aseguró.
En este sentido, el lehendakari afirmó que su "compromiso es garantizar unos servicios sociales de calidad para todas las personas. Primero las personas" y, para ello, se comprometió a mejorar la garantía y la eficacia de las ayudas sociales; priorizar las políticas de inserción social y laboral; garantizar, desde la colaboración interinstitucional, la sostenibilidad de la financiación de los servicios sociales; incentivar la coordinación entre los diferentes servicios de empleo; favorecer y fomentar el acceso a vivienda protegida en régimen de alquiler social; y ejercer un mayor control y seguimiento de las prestaciones sociales.