Seis empresas vascas se unen para constituir la Fundación del Polo de Innovación en Envejecimiento

En palabras de sus fundadores, “este Polo de Innovación al Envejecimiento nace con el objeto de colaborar en la definición de nuevos modelos preventivos, asistenciales y sanitarios, así como de acompañamiento durante los cambios asociados al envejecimiento y su fin último consiste en materializar y desarrollar los proyectos empresariales resultantes, aportando valor y calidad al envejecimiento y creando nuevas soluciones a partir del conocimiento de cada una de nuestras empresas”.
En esa línea, los fundadores manifiestan su voluntad de incorporar al proyecto a cuantos agentes estuviesen interesados y fuesen capaces de incorporar valor al mismo, ya sea en el área de investigación, provisión de servicios o iniciativas empresariales con afectación a este espacio del envejecimiento y la salud. Esta incorporación podría realizarse, bien integrándose como agentes del Polo, bien a través de acuerdos o alianzas que lo posibiliten, sin necesidad de integrarse en el mismo.
Los agentes comparten una visión común en relación a la necesidad y oportunidad de impulsar la innovación, enfocada a la provisión de servicios avanzados para esta población. Al tiempo que expresaron su voluntad para que esta agrupación sirva como elemento de colaboración con las instituciones públicas en el enfoque y desarrollo del sistema de investigación científica y tecnológica, buscando para ello facilitar la interlocución y la acción ante las administraciones públicas del envejecimiento y la salud, tanto de ámbito local, autonómico, estatal y europeo.
“Se trata de una iniciativa que no sólo pretende impulsar un sector de actividad empresarial, sino que entre sus valores demuestra también nuestro compromiso con la sociedad vasca y nuestro apoyo a la sostenibilidad de la sociedad del bienestar”, afirma uno de los firmantes. “Buscamos calidad de vida para que los ciudadanos de Euskadi envejezcan lo mejor posible y que nuestro nivel de servicios atraiga a otros ciudadanos por esta razón; al tiempo que nuestro conocimiento y servicios contribuyan para que los ciudadanos de otros países puedan envejecer también mejor”, añade otro.
En este sentido, la base fundamental del Polo la constituyen agentes del País Vasco y el impacto directo de su actividad redundará principalmente en Euskadi, aunque el ámbito de aplicación de los resultados tiene vocación internacional.
El órgano gestor del Polo, para cumplir el objetivo que se propone, centrará su actividad en: orientar la investigación en términos de obtener los resultados más ventajosos posibles, tanto en impacto social como en impacto económico; estar en conexión y colaboración permanente con las administraciones públicas, generando un auténtico espacio de colaboración público-privada; y generar consorcios entre agentes y con terceros, bien para sugerir proyectos de alta potencialidad, bien para acudir de forma competente a convocatorias públicas (autonómica, estatal, internacional).
Para todo ello, el Polo espera aunar investigación, atención innovadora, transferencia de conocimiento y explotación de resultados. “No es un proyecto –señala su presidente, José Antonio Aguirre Franco- exclusivamente de I+D, sino que engloba todos los demás elementos, traccionados desde la necesidad y la empresa y centrados en la persona mayor, en mejorar su calidad de vida y su bienestar, partiendo del respeto pleno a su dignidad y derechos, de sus intereses y preferencias y contando con su participación efectiva”.