La diputada de Acción Social de Bizkaia asegura que la Institución prima el modelo residencial de colaboración público-privada
Pilar Ardanza participó en un acto con motivo del centenario de la Fundación Miranda, a la que agradeció 'una labor humanitaria destacable en atender a las personas mayores necesitadas'

La Diputación foral de Bizkaia reafirmó su compromiso con las personas mayores participando en una de las conferencias organizadas por la Fundación Miranda con motivo de su centenario. El Departamento de Acción Social agradeció el trabajo que realiza la fundación, iniciativa de Antonio Miranda y Arana, un referente entre las iniciativas privadas que realiza una labor humanitaria destacable en atender a las personas mayores necesitadas.
La diputada foral de Acción Social, Pilar Ardanza, apostó por la alianza público-privada, “la colaboración entre el Departamento de Acción Social y el Tercer Sector Social buscando la adecuación del modelo de colaboración público- privado que se ha ido consolidando a lo largo de los años”. El compromiso que se deriva de este modelo mixto, consiste en la concertación de plazas de las residencias privadas “porque el Territorio Histórico de Bizkaia cuenta con suficientes plazas residenciales”. Tras la construcción de las infraestructuras necesarias, la Diputación impulsa un modelo que responde al principio de aprovechamiento de recursos, y al de cooperación y promoción de la iniciativa social.
La diputada de Acción Social realizó estas declaraciones ante el público interesado por la gestión de la institución foral en materias como el envejecimiento activo, personas en situación de dependencia y los servicios con los que cuentan. Ante la realidad de que la población de 65 y más años de edad, experimentará un importante crecimiento en los próximos años, Ardanza explicó que su atención “requerirá un gran esfuerzo y recursos económicos importantes por parte de la Administración”. No obstante, señaló que casi el 90% de las personas mayores de 65 años prescinden de esos servicios “y podemos considerarles un importante capital activo”.
Desde la Diputación Foral de Bizkaia se reivindican políticas públicas que promuevan el envejecimiento activo, “para conseguir que sean ellos protagonistas de sus propias vidas, envejecer de una manera activa, implicada y no desvinculada de la realidad, está relacionada con el bienestar de la persona”, afirmó Ardanza.
Medalla de Oro
Por otra parte, y también aprovechando los 100 años que cumple la Fundación Miranda, el Ayuntamiento de Barakaldo aprobó por unanimidad una propuesta para que se otorgue a esta entidad la máxima condecoración honorífica que se puede conceder a un colectivo de la ciudad: la Medalla de Oro de la Anteiglesia.
La diputada foral de Acción Social, Pilar Ardanza, apostó por la alianza público-privada, “la colaboración entre el Departamento de Acción Social y el Tercer Sector Social buscando la adecuación del modelo de colaboración público- privado que se ha ido consolidando a lo largo de los años”. El compromiso que se deriva de este modelo mixto, consiste en la concertación de plazas de las residencias privadas “porque el Territorio Histórico de Bizkaia cuenta con suficientes plazas residenciales”. Tras la construcción de las infraestructuras necesarias, la Diputación impulsa un modelo que responde al principio de aprovechamiento de recursos, y al de cooperación y promoción de la iniciativa social.
La diputada de Acción Social realizó estas declaraciones ante el público interesado por la gestión de la institución foral en materias como el envejecimiento activo, personas en situación de dependencia y los servicios con los que cuentan. Ante la realidad de que la población de 65 y más años de edad, experimentará un importante crecimiento en los próximos años, Ardanza explicó que su atención “requerirá un gran esfuerzo y recursos económicos importantes por parte de la Administración”. No obstante, señaló que casi el 90% de las personas mayores de 65 años prescinden de esos servicios “y podemos considerarles un importante capital activo”.
Desde la Diputación Foral de Bizkaia se reivindican políticas públicas que promuevan el envejecimiento activo, “para conseguir que sean ellos protagonistas de sus propias vidas, envejecer de una manera activa, implicada y no desvinculada de la realidad, está relacionada con el bienestar de la persona”, afirmó Ardanza.
Medalla de Oro
Por otra parte, y también aprovechando los 100 años que cumple la Fundación Miranda, el Ayuntamiento de Barakaldo aprobó por unanimidad una propuesta para que se otorgue a esta entidad la máxima condecoración honorífica que se puede conceder a un colectivo de la ciudad: la Medalla de Oro de la Anteiglesia.