Euskadi ocupa un lugar destacado en la Unión Europea en el Índice de Envejecimiento Activo
El cálculo del AAI sitúa al territorio vasco en el puesto número siete en el ranking de los 28 países de la UE, y la puntuación obtenida (36,6) lo posiciona por delante del Estado español y de países como Alemania, Austria o Francia

El Índice de Envejecimiento Activo (AAI) es el resultado de un proyecto de investigación gestionado conjuntamente por la Dirección General de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión de la Comisión Europea y la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas (UNECE). La finalidad de este proyecto, iniciado en 2012, residía en el diseño de una herramienta que facilitara la creación de estrategias y políticas públicas que incorporasen los retos asociados al envejecimiento de la población.
El desarrollo del AAI se produce en el contexto de celebración del Año Europeo del Envejecimiento Activo y la Solidaridad Intergeneracional, que coincide con el décimo aniversario de la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento celebrada en Madrid en 2002, y el segundo ciclo de evaluación de la implementación del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento.
Para el diseño del índice se tuvo en cuenta la definición de envejecimiento activo propuesta por la OMS (2002) y los acuerdos pactados en el seno de la celebración del Año Europeo del Envejecimiento Activo, incluyendo las áreas a promover y la implementación prevista de esta estrategia.
Para la medición del envejecimiento activo, el AAI se evalúa sobre población mayor de 55 años, y se contemplan cuatro dimensiones: empleo, participación, independencia y capacidades. Cada una de estas áre as, que no computan por igual en la puntuación global, se calcula a través de un total de 22 indicadores.
El Estudio de Condiciones de Vida de las Personas Mayores, de donde se extraen los datos del Índice en Euskadi, se centraba en mayores de 65 años, sin embargo, este rango se amplió a 55 años, para obtener información más rigurosa.
Así, el proyecto se está desarrollando en dos fases: la primera (enero 2012–febrero 2013) culminó con la publicación de los resultados del índice para 27 países de la Unión Europea, incluyendo también la presentación de la herramienta a nivel político, social e investigador.
La segunda (octubre 2013–diciembre 2015) tiene como meta principal la aplicación del AAI y la formulación de políticas basadas en la evidencia de los datos obtenidos. Recientemente se difundieron nuevos datos sobre el ranking europeo, que cuenta con 28 miembros tras la inclusión de Croacia.
Comparativa europea
El cálculo del Índice de Envejecimiento Activo en Euskadi le otorga el puesto número 7 del ranking de los 28 países de la UE analizados. La puntuación obtenida (36,3), resultado de esa diferente puntuación atribuida a cada dimensión, es superior a la puntuación media del AAI en Europa (34,1). Esto posiciona a Euskadi en un muy buen lugar, teniendo en cuenta que se sitúa por delante de países como Alemania, Austria o Francia, con elevados grados de bienestar y protección social.
De forma más concreta, la puntuación del dominio del empleo se obtiene calculando la tasa de ocupación para cada grupo de edad (55-59; 60-64; 65-69; 70-74). Euskadi se sitúa en el puesto número 15, ligeramente por debajo de la media de los 28 y algo por encima del Estado español (puesto 19).
En relación con el área de participación, se tienen en cuenta para su cálculo las actividades de voluntariado y asociacionismo; las que implican el cuidado informal tanto de hijos y nietos como de mayores y discapacitados; y, por último, la participación política. Euskadi se sitúa en un noveno puesto con una puntuación superior a la media de los 28, y el estado español está posicionado en el puesto 15.
El porcentaje que más destaca en Euskadi es el de personas de más de 55 años que cuidan de hijos y nietos; el 44% con una frecuencia semanal, frente al 32,5% del conjunto de la UE. También la cifra de personas que participan en actividades de voluntariado y asociaciones es más elevada, el 19% (en contraposición al 14,8% de la UE28 y el 9,6% en el Estado).
La tercera dimensión, la de vida independiente, incluye información sobre ejercicio físico, las necesidades de salud (médicas y dentales), el tipo de hogar, la renta mediana, el riesgo de pobreza, la privación material, la seguridad física y el aprendizaje a lo largo de la vida.
El puesto que ocupa Euskadi es el 14, situándose algo por encima de la puntuación media de los 28 países analizados. Es destacable el alto porcentaje de personas mayores de 55 años en Euskadi (60,9%) que realizan ejercicio más de cinco veces por semana (entendiendo este como deporte o cualquier otra actividad física como ir en bici, caminar, trabajar en el jardín o huerto, etcétera). Otra cifra destacable al alza es la percepción de seguridad de la ciudadanía de Euskadi frente a la media de los 28 y del Estado. Por otro lado, existe también una cifra que se distingue por ser inferior, la de personas que viven en hogares unipersonales o en pareja (61% frente al 84,2% de la UE28). La cohabitación con otros miembros de la familia, principalmente los hijos, es muy frecuente en Euskadi entre las personas mayores de 55 años. La emancipación de los hijos es más tardía que en el resto de Europa y las circunstancias acaecidas por la crisis económica han podido elevarla. Hay que tener en cuenta, además, que el tejido familiar es muy importante en la cultura vasca, y es fuente de bienestar y apoyo.
Por último, la dimensión de la capacidad incluye aspectos como la esperanza de vida, esperanza de vida en salud, salud mental, uso de las nuevas tecnologías, tejido social y nivel de instrucción.
En este subíndice, Euskadi obtiene una de las tres mejores puntuaciones europeas. Solamente consiguen superarle Suecia y Dinamarca. Los indicadores relacionados con la salud, como la esperanza de vida o la salud mental, son superiores en Euskadi a la media de la UE28 y el Estado español. Otro porcentaje destacado hace referencia al fuerte tejido social existente (el 95,8% tiene contacto presencial frecuente con hijos, amigos, vecinos y otros familiares). Este contacto es de vital importancia para la consecución de un envejecimiento satisfactorio.
El desarrollo del AAI se produce en el contexto de celebración del Año Europeo del Envejecimiento Activo y la Solidaridad Intergeneracional, que coincide con el décimo aniversario de la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento celebrada en Madrid en 2002, y el segundo ciclo de evaluación de la implementación del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento.
Para el diseño del índice se tuvo en cuenta la definición de envejecimiento activo propuesta por la OMS (2002) y los acuerdos pactados en el seno de la celebración del Año Europeo del Envejecimiento Activo, incluyendo las áreas a promover y la implementación prevista de esta estrategia.
Para la medición del envejecimiento activo, el AAI se evalúa sobre población mayor de 55 años, y se contemplan cuatro dimensiones: empleo, participación, independencia y capacidades. Cada una de estas áre as, que no computan por igual en la puntuación global, se calcula a través de un total de 22 indicadores.
El Estudio de Condiciones de Vida de las Personas Mayores, de donde se extraen los datos del Índice en Euskadi, se centraba en mayores de 65 años, sin embargo, este rango se amplió a 55 años, para obtener información más rigurosa.
Así, el proyecto se está desarrollando en dos fases: la primera (enero 2012–febrero 2013) culminó con la publicación de los resultados del índice para 27 países de la Unión Europea, incluyendo también la presentación de la herramienta a nivel político, social e investigador.
La segunda (octubre 2013–diciembre 2015) tiene como meta principal la aplicación del AAI y la formulación de políticas basadas en la evidencia de los datos obtenidos. Recientemente se difundieron nuevos datos sobre el ranking europeo, que cuenta con 28 miembros tras la inclusión de Croacia.
Comparativa europea
El cálculo del Índice de Envejecimiento Activo en Euskadi le otorga el puesto número 7 del ranking de los 28 países de la UE analizados. La puntuación obtenida (36,3), resultado de esa diferente puntuación atribuida a cada dimensión, es superior a la puntuación media del AAI en Europa (34,1). Esto posiciona a Euskadi en un muy buen lugar, teniendo en cuenta que se sitúa por delante de países como Alemania, Austria o Francia, con elevados grados de bienestar y protección social.
De forma más concreta, la puntuación del dominio del empleo se obtiene calculando la tasa de ocupación para cada grupo de edad (55-59; 60-64; 65-69; 70-74). Euskadi se sitúa en el puesto número 15, ligeramente por debajo de la media de los 28 y algo por encima del Estado español (puesto 19).
En relación con el área de participación, se tienen en cuenta para su cálculo las actividades de voluntariado y asociacionismo; las que implican el cuidado informal tanto de hijos y nietos como de mayores y discapacitados; y, por último, la participación política. Euskadi se sitúa en un noveno puesto con una puntuación superior a la media de los 28, y el estado español está posicionado en el puesto 15.
El porcentaje que más destaca en Euskadi es el de personas de más de 55 años que cuidan de hijos y nietos; el 44% con una frecuencia semanal, frente al 32,5% del conjunto de la UE. También la cifra de personas que participan en actividades de voluntariado y asociaciones es más elevada, el 19% (en contraposición al 14,8% de la UE28 y el 9,6% en el Estado).
La tercera dimensión, la de vida independiente, incluye información sobre ejercicio físico, las necesidades de salud (médicas y dentales), el tipo de hogar, la renta mediana, el riesgo de pobreza, la privación material, la seguridad física y el aprendizaje a lo largo de la vida.
El puesto que ocupa Euskadi es el 14, situándose algo por encima de la puntuación media de los 28 países analizados. Es destacable el alto porcentaje de personas mayores de 55 años en Euskadi (60,9%) que realizan ejercicio más de cinco veces por semana (entendiendo este como deporte o cualquier otra actividad física como ir en bici, caminar, trabajar en el jardín o huerto, etcétera). Otra cifra destacable al alza es la percepción de seguridad de la ciudadanía de Euskadi frente a la media de los 28 y del Estado. Por otro lado, existe también una cifra que se distingue por ser inferior, la de personas que viven en hogares unipersonales o en pareja (61% frente al 84,2% de la UE28). La cohabitación con otros miembros de la familia, principalmente los hijos, es muy frecuente en Euskadi entre las personas mayores de 55 años. La emancipación de los hijos es más tardía que en el resto de Europa y las circunstancias acaecidas por la crisis económica han podido elevarla. Hay que tener en cuenta, además, que el tejido familiar es muy importante en la cultura vasca, y es fuente de bienestar y apoyo.
Por último, la dimensión de la capacidad incluye aspectos como la esperanza de vida, esperanza de vida en salud, salud mental, uso de las nuevas tecnologías, tejido social y nivel de instrucción.
En este subíndice, Euskadi obtiene una de las tres mejores puntuaciones europeas. Solamente consiguen superarle Suecia y Dinamarca. Los indicadores relacionados con la salud, como la esperanza de vida o la salud mental, son superiores en Euskadi a la media de la UE28 y el Estado español. Otro porcentaje destacado hace referencia al fuerte tejido social existente (el 95,8% tiene contacto presencial frecuente con hijos, amigos, vecinos y otros familiares). Este contacto es de vital importancia para la consecución de un envejecimiento satisfactorio.