Araba aporta más de un millón de euros a las viviendas comunitarias de personas mayores

La administración alavesa, en su apuesta porque las personas mayores sean atendidas en su entorno más directo, que les permita seguir relacionándose con sus vivencias más próximas, mantiene su apuesta por colaborar con los ayuntamientos alaveses. En este caso renueva su colaboración con Amurrio, Aspárrena, Campezo, Laguardia y Valdegovía, para que en las viviendas que están ubicadas en sus municipios atiendan a un total de 75 personas mayores.
Así, con el Ayuntamiento de Amurrio, la Diputación prorroga su convenio de colaboración por un importe de 106.288 euros para el funcionamiento de la vivienda comunitaria existente en su municipio con capacidad para ocho plazas. Del mismo modo, se mantiene la colaboración con el Ayuntamiento de Aspárrena para la gestión de este mismo recurso que atiende a 12 personas en la cantidad de 170.273 euros. Para colaborar con el Ayuntamiento de Campezo, la Diputación aporta 256.074 euros para el funcionamiento de la Vivienda Comunitaria que tiene una capacidad de 14 personas en régimen residencial y cuatro más en atención diurna. La Administración foral y el Ayuntamiento de Laguardia seguirán colaborando con 341.244 euros en este recurso que atiende a 18 personas. Asimismo, el departamento de Servicios Sociales de la Diputación aportará al Ayuntamiento de Valdegovía la cantidad de 137.377 euros para sufragar los gastos de mantenimiento y gestión de la Vivienda Comunitaria ubicada en la localidad de Espejo con capacidad para trece personas mayores.
Las Viviendas Comunitarias, aunque también sirven de vivienda habitual y colectiva para las personas mayores, se diferencian de las residencias en que están ubicadas en el entorno habitual de las personas atendidas, son más pequeñas y son quienes viven en ellas los que realizan las tareas de la vida cotidiana. Solo reciben asistencia en los trabajos más difíciles.
Su objetivo es proporcionar una vivienda a las personas mayores que carezcan de ella, o a quienes su propia vivienda presenta grandes deficiencias que la hacen inhabitable. También acogen a mayores con graves problemas de soledad y abandono.