Las previsiones aseguran que este verano visitarán España alrededor de 50 millones de turistas, tanto extranjeros como nacionales. Una cifra que, sumada a las 160 millones de pernoctaciones que se espera para estas fechas –junio, julio, agosto y septiembre–, se empieza a asemejar a las registradas antes de la pandemia.
Estos son algunos de los datos que arroja el último informe de Comisiones Obreras (CC OO) Servicios titulado
El modelo turístico ante la encrucijada de la recuperación, en el que se analiza la actividad del turismo español en 2022, se apuntan las primeras previsiones para estos meses estivales y se proponen algunas medidas para la necesaria –aseguran desde el sindicato– transformación hacia un sector “socialmente justo y sostenible”.
Tras el parón en seco que supuso la crisis sanitaria para la industria hostelera y de la restauración, la recuperación parece una realidad: en 2022, por ejemplo, se incrementó un 69% los visitantes anuales con respecto al año anterior, es decir, 42 millones de turistas más que en 2021. Algo lógico si tenemos en cuenta que, por aquel entonces, todavía existían restricciones por la Covid-19. Sin embargo, son resultados que acercan ya a los 56 millones de turistas extranjeros que visitaron España en 2019; y cifras que superan ya –si hablamos de turistas nacionales– en más de 410.000 personas a los datos prepandemia.
Si nos fijamos en la oferta turística hotelera, 2022 también incrementó el número de establecimientos un 22% con respecto al año anterior, así como sus habitaciones (37%) y el número de plazas (39%). El informe indica que los niveles en estos valores no llegan a los de 2019, pero también remarca dos aspectos que inciden negativamente en las infraestructuras hoteleras: los consabidos problemas financieros tras la crisis sanitaria y la alternativa de alojamiento que supone la vivienda de uso turístico, un recurso que va en aumento.
Por otro lado, y si analizamos la rentabilidad del sector hostelero, el informe muestra que la facturación media diaria de los hoteles por cada habitación ocupada (ADR) ha sido de 104,70 euros, un 18% superior al nivel de 2019. Además, en cuanto al ingreso medio por habitación disponible (RevPAR), este indicador se sitúa en los 67,80 euros, “un espectacular crecimiento del 49% en solo un año, situándose ya un 15% también por encima del valor de 2019”, redacta el informe.
BUENAS EXPECTATIVAS, PERO TAMBIÉN AMENAZAS
Este año es el primero con movilidad total entre países desde que la Covid-19 irrumpiese en 2020. El informe señala que este hecho, junto con los buenos datos registrados en el primer cuatrimestre del año, son los que llevan a pensar que la época estival será muy positiva. En los primeros cuatro meses de 2023, las cifras de viajeros ( más del 2,3%) como las de pernoctaciones (0,8% por encima) superan los datos previos a la pandemia. Mientras que el turismo nacional ya supera con creces las cifras de 2019 (4,8% más), el turismo extranjero se queda solo un 0,5% por debajo.
Para el sindicato hay dos factores que incrementarán la demanda este verano: por un lado, las propias ganas de viajar por parte de los ciudadanos con la normalidad restablecida y, por otra, el incremento de la capacidad de gasto. Este incremento de la capacidad de gasto viene derivado por los ahorros generados, precisamente, en tiempos de pandemia, pero también –apunta el informe– por la mejora en 2022 de la calidad del empleo, “tanto en términos de contratación indefinida tras la puesta en marcha de la Reforma Laboral, como por la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI)”, que en la actualidad es de 1.080 euros brutos mensuales en 14 pagas.
Pese a estos datos halagüeños, el sector de la hostelería y de la restauración también tiene algunas amenazas en el horizonte y una preocupante tendencia en cuanto al empleo. Por ejemplo, en el informe se constata que, desde el inicio de la pandemia, más de 75.000 personas han abandonado el sector en busca de sueldo mayores y mejores condiciones horarias. “Los turnos partidos, el trabajo en fines de semana y festivos, los amplios horarios de apertura de bares y restaurantes y la negativa incidencia del aumento de cargas de trabajo en la salud laboral del personal de alojamiento, hacen que la demanda de empleo por parte de las empresas para cubrir los picos de actividad de las temporadas altas del turismo, encuentre problemas para ser cubierta”, indica el informe. Es decir, no es que exista escasez de profesionales, sino que estos –añaden en CC OO– tienen “la necesidad de mejorar social y económicamente”.
Además de esta tendencia negativa, hay otros factores que podrían hacer peligrar las previsiones de turismo para 2023. Entre ellos, constata el informe, esta la subida de precios en el sector hostelero, con unos índices por encima del IPC desde el cuarto trimestre de 2022. Esto puede ser una amenaza “ante la pérdida de poder adquisitivo de los salarios a nivel general”. “Esta tendencia de devaluación salarial –añade el informe– se ve agravada en el sector de la hostelería, especialmente en el subsector de la restauración, que parte ya de una situación de precariedad al situarse en el escalón más bajo en términos retributivos, del conjunto de la actividad económica del país”.
Finalmente, el informe destaca otra debilidad del sector turístico español: la excesiva dependencia del producto sol y playa, y de mercados como el inglés, francés, alemán y de los países nórdicos. Estos mercados representan más de la mitad del mercado extranjero y tras la Covid-19 no han parado de disminuir, a excepción el turismo francés (un 3% mayor).
Desde el sindicato proponen desarrollar nuevas ofertas turísticas con otros destinos, cambiando la estacionalidad, incluyendo el turismo rural, que incluso “podría ser un acicate para contrarrestar el fenómeno de la despoblación rural”.
Además, desde CC OO también creen conveniente abrirse a ofertas de turismo cultural y de ocio, apuntando a colectivos específicos como, por ejemplo, el senior, un mercado en alza en los últimos años.
DECÁLOGO PARA LA TRANSFORMACIÓN SOSTENIBLE Y SOCIALMENTE JUSTA
Después de presentar el análisis pormenorizado del turismo en España, Comisiones Obreras (CC OO) Servicios propuso un decálogo de propuestas para la transformación sostenible y socialmente justa del sector.
La primera recomendación del sindicato está relacionada con la propia sostenibilidad turística, al ser un sector que deja una gran huella de carbono y está muy afectado por el cambio climático. Por este motivo, entienden que es imprescindible “minimizar la estacionalidad y desarrollar nuevos nichos turísticos”.
La segunda propuesta guarda relación con la presión sobre la vivienda y conceptos como la ‘balearización’ (especulación de algunas zonas) o ‘ibización’ (que expulsa a los residentes para hacer sitio a los turistas). En este sentido, CC OO apunta hacia el incremento de salarios, pero sobre todo la implementación de políticas de vivienda pública.
La pervivencia y actualización del Acuerdo Marco Estatal para la Hostelería (ALEH) es la tercera propuesta del sindicato, que pese a ser un elemento estabilizador, necesita una modernización de sus contenidos.
La cuarta y quinta propuesta se refiere a la adecuación de la contratación fija discontinua al sector, y a la importancia de mejorar los salarios, respectivamente. CC OO entiende que el sector puede tener la necesidad de contar con una regulación específica, pero esto no debe significar el asentamiento de una nueva precariedad.
La sexta, séptima y octava propuesta se vinculan a calidad del empleo y el servicio. El sindicato aboga por mejores estándares de calidad y una menor carga de trabajo para sus empleados. Además, señala la importancia de la calidad de los descansos y lo esencial de una mayor profesionalización a través de la formación y la promoción en el trabajo.
La novena propuesta es resolver el mal uso del catálogo de ocupaciones de difícil cobertura. Es decir, el sindicato ve imprescindible actualizar los convenios colectivos, con mejores condiciones salariales y de trabajo.
Finalmente, CC OO alude a la responsabilidad sectorial y a los hoteles justos. El sindicato leva un tiempo desarrollando el proyecto ‘Hoteles Justos’, con el objetivo de sensibilizar a las empresas, personas trabajadoras y a la clientela sobre la relevancia del trabajo decente y el turismo socialmente responsable.