La Junta de Castilla y León, en Consejo de Gobierno celebrado a mediados de marzo, aprobó destinar más de 3,8 millones de euros a dos anualidades –con posible prórroga de otros dos– al contrato del servicio de doble lectura y emisión de los informes diagnósticos necesarios para el desarrollo del Programa autonómico de detección precoz del cáncer de mama. Esta estrategia, hasta el 2023 estaba entre los 45 y 69 años, y desde este año se amplía a las mujeres de hasta 74 años. 

Por otro lado, si hasta ahora la población diana a la que iba dirigido el Programa de Prevención y Detección Precoz de Cáncer Colorrectal iba desde los 50 hasta los 69 años, desde el 1 de abril se extiende a las personas de 70 a 74 años (ambos inclusive). Castilla y león es una de las primeras comunidades en hacer efectiva esta ampliación que recomienda la Asociación Española de Gastroenterología y la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria. 

Finalmente, el Consejo de Gobierno autorizó, a finales de marzo, a la Consejería de Sanidad a la adquisición de 60.000 dosis de vacunas recombinantes y adyuvadas del herpes zóster –por ocho millones– con las que ofertar la inmunización sistemática a las cohortes poblacionales que durante el presente año cumplen los 65 y, por primera vez en este campaña, los de 80 años.