Grupo Social Lares y un total de 78 centros asociados a Lares ya se encuentran inmersos en el proyecto ‘Procesos de transformación digital para la modernización y refuerzo del conjunto de los servicios de centros para los cuidados de larga duración’ financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Un estudio realizado a residencias asociadas a Lares puso de manifiesto que 60,6% de los centros solo invierte entre 1 y 6.000 euros en tecnologías y el 74% se relaciona con sus grupos de interés, de manera unidireccional, a través del correo electrónico. En el caso de los procesos organizativos, el 56,7% de los casos son artesanos y los profesionales trabajan de manera manual, principalmente con formato papel y algunos documentos digitalizados en Office; el 37,5% cuenta con un manual de calidad de manera digital con documentos en línea y solo el 5,8% desarrolla sus procesos de forma más definida, documentada y digitalizada mediante un software de gestión.
El proyecto contempla el despliegue de una estrategia de transformación digital que se implementará en 78 centros asociados a Lares en 13 comunidades autónomas.
Entre los sistemas, destaca el control de errantes –herramienta que ayuda a proporcionar protección adicional a los residentes– y sensores de caídas –herramienta aumenta la seguridad y evita el uso de sujeciones en centros–.
Asimismo, se contempla la formación y adquisición de habilidades para el cambio cultural de las propias organizaciones, “visibilizando la tecnología como una aliada necesaria para disminuir la brecha digital y sumar sinergias en torno a la eficacia de los procesos”.
Una de las líneas se centra en implementar herramientas orientadas a ampliar y mejorar la gestión de relación con las familias y personas atendidas. El objetivo es “mejorar la interacción respetando su dignidad y sus derechos y utilizando dispositivos cada vez menos intrusivos y nocivos (permitiendo eliminar sujeciones). Además, estas herramientas permitirán que las familias puedan estar informadas en tiempo real gracias al monitoreo remoto y la inteligencia artificial.
El proyecto beneficiará a más de 9.000 personas de forma directa y permitirá a distintos centros Lares comenzar a adoptar una cultura digital en sus procesos internos que reducirá de manera significativa la brecha digital y mejorará los procesos de atención.