La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, afirmó que la Ley Tercer Sector es, sin duda, “una pieza importantísima” en nuestra democracia ya que esta ley marcó un hito, un cambio e impulso para un sector fundamental para la sociedad. Así lo ha manifestado durante la inauguración de la jornada ‘La ley del tercer sector y los retos pendientes’ celebrada con motivo del 10º aniversario Plataforma del Tercer Sector (PTS). Durante el acto, exministras y ministros y representantes políticos y sociales recibieron el reconocimiento por su labor en la defensa de los derechos sociales.

Además, en la inauguración también ha participado el presidente de la PTS, Luciano Poyato, quien reivindicó todos los logros alcanzados durante los diez años de vida de la PTS: diez años trabajando en red, fortaleciendo al sector, construyendo tejido social, fomentando el voluntariado y la implicación de la sociedad.

Durante su intervención, la presidenta del Congreso subrayó que el tercer sector es la mejor expresión del principio de solidaridad ya que “una democracia fuerte necesita una sociedad civil fuerte que responda a la demanda de las necesidades de quienes no son escuchados”. En este sentido, Batet apuntó que cuando se consiguen éxitos como la Ley del Tercer Sector “aprecias la capacidad de negociar y debatir para aprobar leyes con las que construimos una sociedad más libre y justa. Trabajamos para el interés general y para mejorar la vida de las personas”.

Batet también insistió en que en esta década se ha avanzado en la institucionalización del sector y su capacidad de interlocución con los poderes públicos, pero “si realmente queremos combatir la desigualdad, además del compromiso de los actores públicos necesitamos la participación de la sociedad en su conjunto”. La presidenta concluyó subrayando que la celebración de esta jornada y aniversario “sirve para insistir en la importancia del tercer sector como elemento constitutivo de una sociedad democrática avanzada”.

Por su parte, Poyato puso de manifiesto el complejo contexto social y económico actual y resaltó que la aprobación de la Ley del Tercer Sector hace siete años “ofreció por primera vez un marco jurídico a las entidades del Tercer Sector y vino a fortalecer nuestra capacidad como interlocutores antes las Administraciones. Una ley pionera, con enorme valor político e institucional”. Sin embargo, recodó que aún se deben “abordar los retos pendientes vinculados a ella y para ello necesitamos que la Ley del Tercer Sector se aplique y desarrolle en su totalidad. Necesitamos fomentar y mejorar el diálogo civil para que nuestra interlocución con las administraciones genere una relación y un diálogo real, permanente y efectivo”. 

Poyato también alentó a que se establezca un marco de colaboración permanente “que reconozca al tercer sector como agente fundamental del desarrollo de las políticas públicas”, sin olvidar que es necesario que “los derechos sociales sean formulados como derechos fundamentales, que se defiendan, protejan y promocionen, con el objetivo de lograr un verdadero estado social”.

Por último, el presidente de la PTS reivindicó todos los logros alcanzados durante los diez años de vida de la PTS porque “aunque hayan pasado diez años, nuestra razón de ser es más necesaria que nunca. La sociedad civil organizada debe ser constante, persistente, innovadora y dinámica para influir en las políticas públicas de este país”.